El 'aedes japonicus', nueva especie invasora de mosquito proveniente del Japón, Corea, el sur de China y Rusia, fue detectado el año pasado en España y ya se ha estabilizado en amplias zonas como Asturias, Cantabria y "no se descarta que lo haga hacia Galicia y hacia otros territorios del norte de la península, como Cataluña", se advierte desde ADEPAP, la asociación de empresas de desinfección y control de plagas de Cataluña, en una información de la Cadena Cope. Se trata de un problema grave, puesto que estos ejemplares pueden ser transmisores de virus que potencialmente pueden causar la muerte.

En las últimas décadasse ha ido expandiendo de forma notable, sobre todo a causa del comercio de neumáticos usadosy es un excelente vector de virus infecciosos como el dengue, el chikungunya y, especialmente, el virus del Nilo Occidental.Este mosquito resiste mejor los climas fríos que el conocido mosquito tigre yprefiere zonas rurales, especialmente con ganadería y con vegetación abundante.De hecho, puede continuar latente durante el invierno porque los huevos resisten incluso la congelación.

El 'aedes japonicus' es de color marrón, algo más grande que el mosquito tigre y tiene rayas doradas en el tórax (son blancas en el caso del mosquito tigre). "Por su rápida capacidad de expansión, este mosquito es muy difícil de erradicar y ha venido para quedarse", explica Quim Sendra, presidente de ADEPAP.

"Si llega a Cataluña lo hará en el norte y en zonas de montaña, boscosas y donde la ganadería esté presente, puesto que este insecto no se adapta en zonas geográficas con temperaturas que superen los 30 grados".Como también pasa con el mosquito común y el mosquito tigre, la hembra de la 'aedes japonicus' pone sus larvas en pequeños charcos o lugares donde se pueda acumular agua. Por lo tanto, "como prevención contra todos los mosquitos, hace falta que evitemos estos pequeños charcos para impedir que se reproduzcan", aconseja Sendra.

Virus potencialmente mortales

El nuevo mosquito invasor es buen transportador de virus y, por lo tanto, una especie transmisora de enfermedades, especialmente del virus del Nilo Occidental, que puede afectar el sistema nervioso en los seres humanos y llegar a provocar la muerte.Los síntomas más habituales de la infección por el virus del Nilo Occidental son fiebre, dolor de cabeza, cansancio, dolor corporal, náuseas, vómitos y, a veces, erupciones a la piel del tronco y agrandamiento de ganglios linfáticos.

El virus se transmite por el contacto con otros animales infectados o con su sangre u otros tejidos, especialmente las aves, que son los principales huéspedes.Así que "si un 'aedes japonicus' pica una ave infectada y después una persona, puede transmitir el virus de una a la otra", explica el presidente de ADEPAP. "Aun así, la gran mayoría de las personas infectadas no tienen síntomas de ningún tipo y solo en el 20 por ciento de infectados puede tener consecuencias graves", aclara y, según afirman expertos y autoridades, de momento el riesgo de transmisiónde enfermedades por picadura de este mosquito en España es, por ahora, muy bajo