Una vez más, las redes sociales se han convertido en creadoras de modas que pueden poner en riesgo la salud. La última es practicar el 'contouring' facial con crema solar, de modo que se aplica en determinadas zonas de la cara para que solo se bronceen las expuestas a la radiación, aumentando el peligro de quemaduras, y a la larga su riesgo de cáncer de piel, según ha alertado el doctor Miguel Sánchez Viera, director del Instituto de Dermatología Integral.
El objetivo de esta moda arriesgada es crear un aspecto de "buena cara", como se suele hacer con el maquillaje. "Es un grave peligro para la salud de la piel, ya que las zonas donde no se aplica el protector solar se queman para conseguir el 'efecto maquillaje' deseado", ha remarcado el doctor.
Además, ha añadido, "es una moda extendida entre la población más joven, que precisamente son los menos conscientes de que las quemaduras solares son un gran factor de riesgo de aparición de cánceres de piel a largo plazo, incluso décadas después de que se hayan producido estas quemaduras".
El problema del 'contouring' realizado con crema solar es que hay zonas del rostro en las que no se utiliza fotoprotección, dejando desprotegida esa zona e incrementando el riesgo de cáncer de piel. "Quizá si las nuevas generaciones supieran que el sol tiene también un efecto de envejecimiento prematuro, no realizarían este tipo de prácticas tan peligrosas", ha advertido Sánchez Viera.
A su juicio, "las redes sociales también deberían ser utilizadas para informar de cómo protegerse del sol y de sus riesgos: utilizar siempre fotoprotector, no tomar el sol en las horas centrales del día, utilizar prendas ligeras para cubrir las zonas expuestas y permanecer en lugares con sombra, especialmente si ha existido un quemadura solar previa".
Cada año aumenta el número de casos de cáncer de piel, tanto melanoma como no melanoma, y se está viendo que cada vez son más frecuentes entre la población más joven. "No utilizar protectores solares para "ponerse morenos" en el menor tiempo posible, sigue siendo el talón de Aquiles en la lucha contra el cáncer cutáneo entre la población más joven. A pesar de que se realizan campañas de concienciación anuales sobre la importancia de la prevención, parece que todavía es algo que no ha calado en este grupo de la población" ha añadido Sánchez Viera.
Muchas personas tienen todavía el concepto de que usar cremas fotoprotectoras evita el bronceado, cuando no es así, incluso si se utiliza un factor de protección muy alto, como puede ser el 50. La función de las cremas solares es aumentar el tiempo que una persona puede estar bajo el sol sin quemarse. Es decir, una crema solar de factor 30 multiplica por 30 los minutos que se puede estar bajo el sol protegido de su radiación.
"Lógicamente, este tiempo se multiplica dependiendo del fototipo de la piel. Una persona con ojos, pelo, piel muy clara y que siempre se quema (Fototipo I) nunca debería exponerse al sol sin crema. Mientras que una persona con ojos, pelo, piel oscura y que se broncea rápido (fototipos a partir del IV) puede utilizar una crema fotoprotectora incluso del 50 y acabará bronceándose, aunque tarde más tiempo, pero de forma segura" ha aclarado el director de IDEI.