Los tradicionales botijos de agua han vuelto a la Festividad de la Virgen del Sagrario celebrada este martes 15 de agosto en la Catedral de Toledo. Tras cuatro largos años y tres ediciones sin poder usarlos -en 2022 se celebró pero se sustituyeron por vasos desechables-, los toledanos por fin han podido recuperar una costumbre muy arraigada en la ciudad.
Desde primera hora de la mañana, toledanos y visitantes han podido acercarse al claustro catedralicio para beber un trago del 'agua de la Virgen', nombre con el que se conoce esta agua que se extrae de los pozos del templo primado. Su denominación 'divina' responde al milagro, siempre según la tradición, que estas aguas, por acción de la Virgen, propiciaron en un joven que había desfallecido por culpa del calor y las apreturas, precisamente en mitad de estos ritos religiosos y festivos.
A las 11:00 horas ha comenzado la jornada festiva con la Misa Pontifical en honor a la Virgen del Sagrario, presidida por el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, a la que ha seguido una procesión por el interior del templo.
A la cita, además de los fieles, han acudido el alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez, además de la vicealcaldesa, Inés Cañizares, la presidenta de la Diputación, Conchi Cedillo, y el delegado de la Junta, Álvaro Gutiérrez, entre otros, quienes posteriormente han cumplido con la tradición 'botijera'.
Velázquez se ha mostrado "muy emocionado" al ser la primera vez que celebra esta fiesta como alcalde, y ha tenido un recuerdo muy especial para "aquellas personas que no pueden participar en los actos programados, por motivos de enfermedad, o porque nos han dejado".
También ha querido agradecer a todos aquellos que hacen posibles las fiestas, que se han desarrollado con normalidad y han sido, en palabras del alcalde, un éxito de participación.
Asimismo, la titular de Seguridad Ciudadana y vicealcaldesa ha reivindicado el valor de las tradiciones para "para mantener el orgullo de ser toledanos" y ha celebrado que por primera vez tras la pandemia se haya recuperado la costumbre de beber en los botijos.
En su opinión, "una sociedad nunca debe perder sus raíces y ha de responder a esos valores que forman parte de la identidad de la ciudad, que unen a los toledanos por encima de cualquier otra cuestión".
Cedillo, por su parte, ha animado a los toledanos a vivir con intensidad estas fiestas y ha felicitado Cedillo al Ayuntamiento de Toledo por la organización de estas fiestas.