Castillos, monasterios, iglesias y un sinfín de obras arquitectónicas se esconden en cada rincón de Ciudad Real, una de las provincias con más joyas patrimoniales de Castilla-La Mancha. Aquí se pueden entrontrar tesoros únicos que se han convertido en un gran atractivo turístico.

Viajar por esta tierra no es solo impregnarse de su belleza y sus tradiciones, sino también conocer parte de su historia y los monumentos que todavía se mantienen a día de hoy. Uno de ellos es la Iglesia de Santiago. Situada en el centro del conocido como barrio del perchel, es el templo más antiguo de los existentes en Ciudad Real, ya que se conservan restos de la primera construcción del siglo XIII.

Este edificio se levantó, muy probablemente, sobre una antigua ermita. Los terrenos en los que se encuentra estaban deshabitados en los tiempos en los que Ciudad Real no era ciudad. Sin embargo, en tales tiempos, donde ahora se ubica la torre de la iglesia se encontraba un torreón de defensa.

Iglesia de Santiago. / Foto: Turismo Castilla-La Mancha.

Así, siendo la iglesia más antigua de la capital, estuvo ubicada en la Judería, la cual se fue llenando de población cristiana a causa del aumento demográfico que experimentó la ciudad desde su fundación en el año 1255 como Villa Real. Fue en aquella época cuando acabó convirtiéndose en la parroquia de una de las tres collaciones que formaban la ciudad, la de Santiago, entre las calles Toledo y Calatrava.

Imponente sencillez

El exterior del edificio impresiona por la sencillez de sus muros de mampostería y por el volumen de su maciza torre campanario, pero, sin duda, lo que de verdad atrae la atención de todo el que visita este espacio es su interior.

Interior de la iglesia. / Foto: Turismo Castilla-La Mancha.

Es una iglesia de tres naves separadas por grandes pilares decorados y cubiertas por una magnifica armadura de madera de estilo mudéjar que data del último tercio del siglo XIV. Asimismo, en el ábside se encuentra una curiosa pintura del dragón apocalíptico en tonos rojos y azules que, junto con otros restos de pintura mural, configuran un conjunto pictórico de los más interesantes de la provincia.