Unos baños de tradición árabe tardía, considerados únicos en la meseta central, han sido hallados en una modesta y vieja vivienda deshabitada desde hace varias décadas en Ajofrín, un pueblo de la provincia de Toledo.
El origen de este descubrimiento se remonta al año 2021, cuando el Ayuntamiento de la localidad toledana solicitó a los propietarios de la casa que realizaran unas reparaciones en la fachada para evitar el desprendimiento de elementos a la vía pública. Sin embargo, lo que comenzó como una simple medida de seguridad se convirtió en el punto de partida para una investigación arqueológica que revelaría la existencia de unos baños medievales en un estado de conservación excepcional, ya que mantienen en magníficas condiciones buena parte de su estructura.
Curiosamente, la casa había sido conocida popularmente en Ajofrín como "los baños árabes", aunque hasta ese momento no existía evidencia que respaldara tal denominación. Pero con la reciente intervención se han confirmado las sospechas: en el interior del inmueble se preservan dos salas abovedadas, correspondientes a la sala caliente y templada de unos antiguos baños de tradición árabe, con características propias de los siglos XIII-XIV.
Tres salas
El equipo de arqueólogos, en estrecha colaboración con los actuales propietarios, llevó a cabo sondeos y catas para documentar la historia y evolución del edificio. Los resultados mostraron que, en su origen, los baños constaban de tres salas: caliente, templada y fría. Aunque la tercera sala ha desaparecido, la estructura y materiales conservados en las otras dos demuestran la pervivencia de técnicas constructivas propias del periodo islámico, como el uso de piedra y ladrillo en el característico aparejo toledano.
Tal y como explican los arqueólogos de Cota 667 Arqueología Miguel Ángel Díaz y Ángela Crespo en la web de Cultura de Castilla-La Mancha, junto a Rafael Caballero García, el hallazgo no se limita a las salas conservadas. En la zona posterior del edificio también se identificó un horno que generaba el calor necesario para la sala caliente mediante un sistema de toberas. Aunque no se encontraron elementos relacionados con el agua, se sospecha que estos podrían haber sido expoliados tras el abandono del baño en siglos posteriores.
El descubrimiento de estos baños rurales en Ajofrín es un caso excepcional en la meseta central, donde predominan los ejemplos urbanos como los famosos baños de Toledo. Además, su datación y similitudes con otros baños, como los de La Zubia en Granada, demuestran la longevidad y adaptación de estas estructuras en la región, incluso en un periodo de declive tras la Reconquista.
Con todo, Díaz ha destacado que la relevancia de este hallazgo es que se trata de un baño rural -Ajofrín era un señorío en la época- en el centro de la Península cuanto todos los baños que se conocen en la zona centro, casi todos en la ciudad de Toledo, son de tipo urbano; y que el siglo XIII es una época ya tardía para su creación porque el resto ya estaba en desuso.
Los propietarios del inmueble de Ajofrín que escondía esta joya del pasado se han mostrado dispuestos a conservarlo, acondicionarlo y, probablemente, en el futuro hacer que sea visitable, informa la Agencia EFE.