Último encuentro liguero en casa de este 2021 para el Soliss Fútbol Sala Talavera y será el Software Delsol Mengíbar el que, desde las 18:00 horas de este sábado 11 de diciembre, visitará el Pabellón ‘Primero de Mayo’ de Talavera de la Reina en un encuentro con algo más que tres puntos en juego y estará dirigida por los colegiados Miguel Bardera Barbolla y Eder Gómez de Salazar Fernández (País Vasco).
Y es que sobre el 40x20 se medirán dos equipos que llegan al decimosexto envite del campeonato con los mismos puntos en el casillero, aunque con sensaciones diferentes tras la última cita de competición que disputaron el pasado miércoles (Talavera perdió y Mengíbar ganó). Sin embargo, ambos equipos comparten la misma necesidad de ganar para escapar de la zona de quema y es por ello por lo que nada tendrá que ver lo pasado cuando se ponga la bola en juego.
Sobre su rival de esta jornada, apunta Juanma Marrube que “es un equipo muy experimentado, con muchas horas de vuelo” y se encomienda al embrujo del Primero de Mayo y al calor de la afición para sacar la cita adelante “en casa en los últimos partidos fuimos muy sólidos y yo creo que ahí está el camino, el de reencontrarnos con nuestra esencia”.
No podrá estar para ayudar Buitre, al que posiblemente ya no se le vea hasta 2022 tras recaer de su lesión muscular en la cita frente al Noia Portus Apostoli. Tampoco lo hará Porto a quien su rodilla dañada frente a Unión África Ceutí le ha obligado a parar por un tiempo a la espera de saber si tendrá que pasar definitivamente por quirófano y la tercera de las ausencias será la de Chencho, sancionado con un encuentro tras su expulsión del pasado miércoles en Alcalá de Henares.
Las estadísticas dicen que no es el conjunto jienense un rival que se le dé del todo bien al equipo cerámico, quien ha caído en dos de sus tres comparecencias ante este oponente en casa, la última la temporada pasada por 3-9. Aunque también ha sido capaz de superar al conjunto andaluz y de dicho precedente curiosamente se cumple prácticamente dos años, una cita que también sería la última liguera en casa del año para los locales y que se resolvería por un marcador de 3-0.