Ocho deportistas que representarán a España en los Juegos Paralímpicos de París 2024 pasaron por el Hospital Nacional de Parapléjicos, en Toledo, donde tuvieron su primer contacto con el deporte adaptado, primero en su aproximación terapéutica y luego en el ámbito competitivo.

Las personas que permanecen ingresadas, sus familiares y profesionales del centro podrán seguir los Juegos Paralímpicos a través de dos grandes pantallas que se instalarán en su pabellón deportivo 'HNP Estrella de los Mares', ha informado la Consejería de Sanidad en una nota de prensa.

El público estará pendiente de la participación de quienes, en algún momento de sus vidas, llegaron al centro especializado en lesión medular y hoy son deportistas de élite, además de "un ejemplo de esfuerzo y superación".

La lista de estos deportistas está integrada por Luis Miguel García-Marquina, que compite en las pruebas de ciclismo handbike; Eva María Moral Pedrero, que participará en la prueba de triatlón; Sonia Ruiz, capitana de la selección española femenina de baloncesto en silla de ruedas; y Francisco J. Sánchez Lara, integrante de la selección masculina de baloncesto.

También Loida Zabala, que buscará una medalla en halterofilia; Miguel Ángel Toledo y Francisco Javier López, la apuesta española en el tenis de mesa; y la última incorporación al deporte de élite de Sara Aller, que competirá en Boccia.

Padre del movimiento paralímpico 

Precisamente, el artífice de los Juegos Paralímpicos, el doctor Sir Ludwig Guttmann, fue quien concibió el Hospital Nacional de Parapléjicos. "Este es el sueño de mi vida hecho realidad", dijo el día de su inauguración el famoso neurocirujano.

El objetivo del doctor Guttmann era mejorar la esperanza de vida de los pacientes con lesión medular e integrarlos de nuevo en la sociedad como miembros útiles y respetados.

Las terapias implantadas a modo de tratamiento integral, junto con el deporte como una de las piedras angulares, lograron aumentar la esperanza y calidad de vida de estas personas.

Esta filosofía de tratamiento es, a día de hoy, el motor del desarrollo de los centros especializados en el manejo de la lesión medular, como el Hospital Nacional de Parapléjicos, que el próximo 7 de octubre cumple 50 años.