El BM Alarcos recibe este sábado (17:00 horas) al Handball Bordils con la pretensión de lograr la segunda victoria consecutiva para seguir teniendo opciones de jugar el 'play off' de ascenso. El entrenador, Javier Márquez, ha declarado que "no va a ser un partido fácil, debido a la igualdad que hay en el grupo", pero que "debe ayudar el volver a jugar en nuestra pista y el haber ganado por primera vez esta temporada fuera, en la pista del Cisne".

Una victoria que ha calificado de "importante" por ser "contra un rival directo" y a domicilio, "pero, sobre todo, porque nos permite seguir pensando en mirar hacia arriba y en llegar lo más alto posible". Pese a que el equipo gerundense está por debajo en la clasificación, Márquez ha alertado que "llega en un buen momento de forma después de una victoria en casa y un empate en la pista del Amenábar, que les ha hecho salir de la zona de descenso, lo que les dará mayor motivación".

Además, ha añadido, "está jugando muy bien, con un balonmano muy rápido y dinámico, al ser un equipo con mucha gente joven, pero habituados a jugar desde muy jóvenes tanto a nivel de selecciones como en la Primera catalana". Márquez ha mantenido que el Bordils "conforma un gran conjunto, muy sólido y sus jugadores se conocen a la perfección, ya que llevan jugando muchos años juntos", entre los que ha destacado a los dos extremos, el derecho Marc Combis y el izquierdo Ignasi Moreno, al central Sergi Mach, el lanzador Arnau Palahí y al portero Jordi González que "está en un gran momento de forma", ha analizado.

Varias dudas

Márquez tiene las dudas Robert, Manu Díaz y Vicente Poveda, con procesos gripales, y Victoriano Alises, con un golpe en el cuádriceps, "aunque habrá que esperar la evolución de los cuatro", ha concluido.