Después de estar confinados durante dos semanas, con tres partidos aplazados y tras 23 días sin competir en la Liga Sacyr Asobal (la última vez fue ante el Cisne el pasado 7 de octubre con victoria para los conquenses por 29-32), este sábado volverá a jugar el Incarlopsa Cuenca, que recibe al Logroño La Rioja.
El equipo de Lidio Jiménez volvió el pasado 23 de octubre a los entrenamientos, espera poder sorprender a un equipo que llega con más ritmo de juego y de competición, de lo que es consciente el técnico conquense que ha comentado que "jugaremos ante un equipo más rodado que nosotros, están jugando bien y están yendo de menos a más, tendrán mucha hambre y estarán a su mejor nivel".
Los riojanos son séptimos en la clasificación con 8 puntos, uno menos que Cuenca en un partido más, y llega después de perder por 28-32 ante el Bidasoa Irún este pasado miércoles, por lo que se espera un encuentro más que emocionante entre dos equipos que luchan por los puestos de arriba de la tabla.
La novedad en los conquenses será la vuelta de Ángel Pérez, fichado esta misma semana y que podría tener minutos en este duelo. El central ha señalado que "yo ya le he comunicado a Lidio que si hay que jugar y ayudar el sábado lo puedo hacer. Llevo entrenando casi un par de meses en el Caserío y me encuentro muy bien de forma".
En cuanto a bajas, los conquenses solo tienen la de Leo Maciel, que fue operado del menisco de su rodilla derecha el pasado 8 de octubre, mientras que se espera la vuelta de Lucas Moscariello, quien no ha podido debutar aún en esta temporada por una lesión en uno de sus dedos de la mano derecha, por lo que también tuvo que pasar por el quirófano.
El partido, correspondiente a la jornada 11, está previsto a las 20.00 horas en El Sargal con Ignacio García Serradilla y Andreu Marín Lorente como árbitros, en un encuentro en el que no habrá público en las gradas ya que en Cuenca se han decretado medidas especiales de nivel 3 por la incidencia de la pandemia de Covid-19.