Nuevo episodio de violencia contra un árbitro en el deporte amateur de Castilla-La Mancha. El pasado sábado, el partido del Grupo II de Primera Autonómica de fútbol sala de Castilla-La Mancha que enfrentaba a Miguelturra FS y CD Quintanar de la Orden FS tuvo que ser suspendido por la agresión de un jugador del equipo local al árbitro.
El colegiado fue atendido en un centro médico donde le diagnosticaron una fractura en los huesos propios de la nariz que precisó de varios puntos de sutura, como cuenta La Tribuna de Ciudad Real.
El afectado, que presentó una denuncia por los hechos, ha recibido todo el apoyo por parte del Comité Técnico de Árbitros (CTA) y de la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha (FFCM), quienes han puesto a disposición del afectado sus servicios jurídicos. El presidente de la FFCM, Pablo Burillo, también ha condenado este capítulo públicamente subrayando que "no toleraremos este tipo de acciones en nuestro deporte".
En la vertiente deportiva, el encuentro quedó supendido en el momento de la agresión y ahora tendrá que ser el Comité de Competición el que tome una decisión.