El Yugo Socuéllamos se mantiene intratable al frente de la clasificación del Grupo XVIII de Tercera División. en esta ocasión le tocó al Villarrobledo doblar la rodilla en el Paquito Giménez, en el duelo más interesante de la jornada en la categoría y que dejó claro que los azulones tienen puesta la directa hacia Segunda B.
El partido, para ser justos, no resultó brillante. En especial, en uno primeros minutos muy grises por parte de ambos conjuntos y en los que las impreciones fueron la tónica dominante. Sólo algunos acercamientos a balón parado por parte de los locales agitaban mínimamente a la poblada grada del Paquito Giménez.
Con todo, los visitantes se mostraban serios para impedir que el Socuéllamos se sintiera cómodo, teniendo incluso alguna opción de adelantarse en el marcador. Fue pasada la media hora de juego cuando Piojo entró bien por la banda izquierda y acabó poniendo un peligroso balón al punto de penalti. Por allí apareció Nacho Huertas, pero también una enramada de piernas de la zaga azulona que impidió que su remate viviera más de un par de metros.
El aviso animó al Socuéllamos, que no tardó en marcar la diferencia sobre el terreno. Después de alguna acción más a balón parado, en el minuto 40, llegó el gol. Una internada por la derecha de Parada le permitió al extremo meter un balón envenenado al área pequeña. La defensa rojilla se confió, grave error, y Belencoso entró con mas fuerza que nadie para empujar la pelota a las mallas de Javi López. Con este 1-0 se llegó al descanso.
Segunda parte
En la segunda mitad, el partido no mejoró en calidad, a pesar de que el Villarrobledo sí apostó más por tener la pelota. Con todo, le faltó ser más incisivo al cuadro de Castellanos para poner en serio peligro a los locales. Sólo Piojo trataba de romper la férrea defensa de los azulones, muy serios para impedir remates claro sobre su meta y a la espera de la oportunidad propicia para sentenciar.
Así sucedió en el minuto 66, cuando un balón largo no lo atacó convenientemente Perona en tareas defensivas. Este detalle le permitió a Belencoso rematar contra la portería de un Javi López que no pudo evitar el segundo de los socuellaminos. A partir de entonces, el partido perdió más enteros aún. No en vano, el Villarrobledo lo intentaba sin orden, con más ímpetu que ideas, y sólo un tiro de Montero bien atrapado por Arellano se saltó el guión. De hecho, pudo ampliar su renta el cuadro local, en una acción de Acevedo, pero no fue necesario para confirmar su victoria por 2-0.