La Ciudad del Fútbol de Las Rozas ha acogido este lunes el sorteo de la final por el ascenso a Segunda División B. En este sorteo definitivo, Castilla-La Mancha era la única comunidad junto al País Vasco que conserva tres supervivientes: Socuéllamos, Villarrubia y Villarrobledo.
La primera bola en salir fue la del Socuéllamos que ha sido emparejado con uno de los dos cuartos clasificados supervivientes en esta ronda, el Algeciras. Los gaditanos se han ganado en este play-off la etiqueta de matagigantes después de eliminar a Hospitalet y Jaén, el único equipo que había sumado más de cien puntos en la liga regular. Por mejor clasificación, la ida se disputa este fin de semana en terreno andaluz y la vuelta será el 29-30 de junio en el Paquito Giménez.
Poco después salió la bola del Villarrobledo, que fue emparejado con uno de los campeones, el Lealtad de Villaviciosa. El equipo asturiano, que cayó en la ronda de campeones frente al Getafe B, ha llegado a esta final después de eliminar al Formentera. En este caso, los roblenses tendrán que jugar primero en casa y dirimirán el ascenso en terreno asturiano.
Por último, el Villarrubia se las verá con otro tercer clasificado, el Alcobendas madrileño, donde juega el exblanquiazul Pituli. Este equipo que terminó tercero en el grupo madrileño ha accedido a la final del play-off dejando en la cuneta a La Hoya Lorca y Zamora. Al haber tenido mejor clasificación en liga regular los ciudadrealeños, la ida se disputará este fin de semana en Matapiñonera y la ida el 29-30 de junio en el Campo Nuevo.