El último jugador que se incorporó a la primera plantilla del Albacete, Pape Diamanka, ha confiado este jueves en lograr "un resultado positivo que lo cambie todo", porque según ha dicho tiene claro que "tenemos un buen equipo".
A pesar de su opinión, el conjunto albaceteño ha comenzado la temporada de manera nefasta, al sumar sólo un punto en las cuatro primeras jornadas, logrando solo un gol y encajando siete, cifras que provocan "situaciones raras", porque "cuando no ganas pasa eso", ha comentado Diamanka, que está convencido de que, "en cuanto ganemos el primer partido, iremos para delante".
El único tanto hasta ahora del cuadro blanco lo consiguió este jugador senegalés, que ha mostrado su intención de "ir trabajando cada día para ayudar al equipo a conseguir ganar partidos".
Diamanka, que milita en el Albacete cedido hasta final de temporada por el Girona, se siente "muy integrado en el grupo", ya que según ha apuntado desde su llegada le han facilitado todo "para que me integre en la plantilla y eso es importante porque me encuentro bien y a gusto con el equipo".
Ha reconocido que el interés de su nuevo club viene de lejos y que "tenía otras ofertas" esta campaña, pero ha destacado que "era lo que quería: llegar aquí porque sabía que me iban a tratar bien como está sucediendo".
Y preguntado por el Real Zaragoza, otro de sus exequipos al que se enfrentará el próximo lunes, ha opinado que "será un partido complicado, como todos, porque, aunque no tengan público ahora todos afrontamos igual los partidos".