El CF Talavera de la Reina consiguió salir con vida del Nuevo Vivero de Badajoz tras un partido en el que jugó más de 80 minutos con un jugador menos. La tempranera expulsión de Rodrigo obligó a los cerámicos a sacar su versión más competitiva para resistir el asedio infructuoso del líder del grupo.
La visita se presumía muy complicada al Nuevo Vivero, pero a buen seguro nadie en la expedición talaverana esperaba que se fuera a torcer en menos de diez minutos. Y es que los blanquinegros saltaron al césped con las ideas muy claras y creando oportunidades meritorias sobre la portería de los cerámicos. Aquino fue el principal estilete de los locales, pero sus remates, sin apenas oposición, no fue capaz de dirigirlos a gol.
Cuando parecía que el temporal arreciaba, llegó la jugada que marcó el devenir del choque. Rodrigo fue a pelear un balón suelto y llegó antes que el cancerbero Kike Royo, pero el hecho de ir con los pies por delante provocó que el colegiado le mostrase la roja directa, a pesar de que tocó la pelota antes que el adversario. Con la expulsión del delantero, las cosas se ponían muy complicadas para puntuar ante el líder.
Más aún cuando los pacenses mantuvieron el tono y comenzaron a crear oportunidades sobre la portería contraria, como un mano a mano de Clemente que el atacante mandó fuera cuando Edu Sousa estaba prácticamente batido. Santamaría, en una acción posterior, también avisó con un peligroso cabezazo, mientras que Aquino seguía negado de cara al gol porque el portero talaverano había dado inicio a su recital.
Esta colección de oportunidades se frenó coincidiendo con otro hecho negativo para el CF Talavera. Y es que Adhibe se tuvo que retirar lesionado después de sufrir un severo encontronazo en la disputa de un balón con un jugador del Badajoz. Al menos, hasta el descanso, no pasaron más cosas en contra de un cuadro cerámico que empezó a jugar con el reloj demasiado pronto y que sólo dio un par de avisos tímidos en sendas acciones de Ceberio.
Segunda Parte
En la segunda mitad, el cuadro talaverano saltó al Nuevo Vivero dispuesto a sufrir lo indecible para puntuar. Y lo cierto es que lo consiguió, aunque le costó mucho llegar hasta el término del encuentro resguardando su casillero. No en vano, el Badajoz insistía en plan de derribo de la defensa cerámica, que fue capaz de resistir gracias, en especial, a la seguridad que mostró Edu Sousa bajo palos.
El portero ya tuvo que intervenir nada más volver de los vestuarios para evitar que Clemente, con un gran cabezazo, marcara en otra ocasión clara de los pacenses. Poco a poco, se fue ajustando el conjunto talaverano y las ideas de los locales se enfriaron. De hecho, el cuadro de Víctor Cea se permitió incluso el lujo de salir de la cueva para infundir cierta incertidumbre al líder en acciones a balón parado.
Finalmente, después de un descuento interminable por la gran cantidad de tiempo que se perdió, el CF Talavera consiguió cumplir su objetivo de sumar en un partido en el que todo le fue en contra. Quizás puede parecer un bagaje escaso, pero teniendo en cuenta las circunstancias que le tocó vivir al cuadro cerámico, este empate sabe a victoria.