Se cumplen 60 años del maillot amarillo que se vistió el español Federico Martín Bahamontes, el segundo de un ciclista de su nacionalidad en todos los tiempos, el primero que logró mantener hasta el podium de París.
Fue tal día como hoy en una etapa que acababa en Grenoble y que el Águila de Toledo logró tras una larga escapada junto al luxemburgués Charly Gaul.
La víspera, el español se había impuesto con autoridad en una cronoescalada en el Puy de Dome, lo que le convirtió en el favorito de una dura edición.
En las siguientes etapas, Bahamontes aguantó bien las embestidas de sus rivales en los Alpes y mantuvo la renta lograda en una difícil contrarreloj de 70 kilómetros en Dijon, lo que le permitió convertirse en el primer español en ganar el Tour de Francia.
El maillot amarillo no fue, sin embargo, la prenda favorita de Bahamontes, que mantuvo un idilio a lo largo de su carrera con el jersey de puntos rojos que identifica al rey de la montaña.
El toledano lo ganó por vez primera en 1954 y, en total, acabaría con ella en París en otras cinco ediciones.