El estreno del Dakar en Arabia Saudí, donde hasta hace año y medio las mujeres tenían prohibido conducir, trae consigo una caída de la participación femenina en el rally con solo doce de ellas en la línea de salida, cinco menos que el récord de presencia femenina registrado el año pasado en Perú.



Para este Dakar que se disputará íntegramente en territorio saudí, las mujeres representan el 2,10 % del total de los 572 participantes, pues los otros 560 inscritos son hombres.



Ninguna de las doce participantes es saudí, pues el país anfitrión del Dakar estará representado en la carrera por dieciocho hombres, entre los que destaca Yazeed Al Rajhi, uno de los pilotos del 'top 10' en coches.

Las mujeres que se enfrentarán al desierto de la península arábiga provienen de España, con cuatro representantes; Sudáfrica, con dos, y Alemania, Italia, Holanda, Japón, República Checa y Perú con una por cada país.



De todas ellas, la más reconocida es la española Laia Sanz por ser la mujer con la mejor actuación en motos de la historia del Dakar al finalizar novena en 2015 y por haber completado las nueve ediciones en las que participó, sin abandonar la carrera en ninguna de ellas.



Otra española en motos será la ingeniera zamorana Sara García, que correrá su segundo Dakar tras no haber podido completar la última edición por un tempranero abandono. Para ello repetirá concurso en la categoría de los "originales", donde los pilotos deben reparar la moto ellos mismos, sin ayuda alguna de mecánicos.



También se ha hecho habitual ver en el rally a la odontóloga burgalesa Cristina Gutiérrez, que afronta su cuarto Dakar tras haber alcanzado la meta de los tres anteriores. En Arabia su objetivo será mantener su progresión y finalizar dentro de los veinticinco primeros, a ser posible cerca del decimoquinto puesto.

Mónica Plaza es copiloto de su padre

Desde España también estará en el Dakar en condición de copiloto la conquense Mónica Plaza, una de las participantes más jóvenes del rally, que con 24 años guiará en la navegación a su padre Manolo Plaza.

La única mujer de toda América presente en el rally es la periodista Fernanda Kanno, la primera mujer de Perú en correr el Dakar (2018) y también en finalizarlo (2019), quien ahora busca el reto de culminar la carrera en un territorio desconocido, lejos de Sudamérica, donde el Dakar se disputó los últimos once años.



En esta ocasión solo habrá una tripulación íntegramente femenina, conformada en los UTV (buggys ligeros) por la italiana Camelia Liparoti, leyenda viva del Dakar al acumular con esta once participaciones en el rally, y la alemana Annett Fischer, esposa de Sven Quandt, propietario del equipo X-Raid Mini.



En principio la copiloto de Liparoti iba a ser nuevamente la motociclista española Rosa Romero Font, esposa del doble campeón del Dakar Joan 'Nani' Roma, pero una caída hace pocas semanas le causó fracturas en diez huesos y la dejó fuera del raid.



También se quedó apeada la alemana Andrea Petehansel, quien por primera vez iba a ejercer de copiloto de su marido, el francés Stéphane Peterhansel, campeón de trece ediciones, de ellas seis en motos y siete en coches.

Una pareja unida por el Dakar

Sin embargo, la checa Petra Zemankova sí podrá cumplir el sueño de correr el Dakar junto a su pareja, el español Jordi Queralto, en el debut de ambos en la carrera a bordo de un Jeep Rubicon.



En representación de Sudáfrica competirán en motos las debutantes Calheine Perry y Kirsten Landman, quienes aspiran a convertirse en las primeras mujeres africanas en terminar el Dakar. En el caso de Landman lo hará después de que un accidente la llevase a permanecer en coma durante 11 días en 2013.



Completa el elenco femenino del Dakar la holandesa Mirjam Pol, que participará por octava vez en motos, y la japonesa Mayumi Kezuka, de 26 años, la única mujer de todo el rally en la categoría de camiones, quien competirá como mecánica del camión del equipo Hino que pilota Ikuo Hanawa junto a su hijo Yudai.