El argentino Federico Delbonis, n.51 del mundo, se clasificó por primera vez para la tercera ronda de Roland Garros al apear este miércoles al conquense Pablo Andújar (n.68 y verdugo de Dominic Thiem en primera fase) en cinco sets y tres horas y 23 minutos de partido.
Delbonis, de 30 años, fue a remolque gran parte del partido, pero se fue entonando apoyado en un sólido servicio y logró imponerse a Andújar, de 35 años, al que doblegó en momentos claves de la cuarta manga.
El argentino se llevó el encuentro por 4-6, 6-1, 3-6, 6-3 y 6-2 y firma su primera presencia en la tercera fase de Roland Garros en su novena participación, igualando su mejor marca en un Grand Slam (Australia, en 2016).
Ahora aguardará al vencedor del duelo entre el italiano Fabio Fognini y el húngaro Marton Fucsovics, que se juega también este miércoles.
Andújar, que había ganado tres de los cuatro partidos que había jugado ante Delbonis hasta hoy, se marcha con mal sabor de boca después de haber derribado en un épico encuentro de primera fase disputado el domingo a uno de los gigantes del tenis mundial y especialista en tierra batida, Dominic Thiem.
En su décima participación en la arcilla parisina, el español no logró igualar su techo de tercera ronda lograd en 2015 y se quedó lejos de igualar su mejor resultado en un Grand Slam, los octavos de final en Estados Unidos en 2019.
Se le queda clavada una espina
Tras el partido, Andújar asumió que le queda "una pequeña espina" por la derrota ante Delbonis, al que consideró "uno de los rivales más duros" de este torneo.
"No me cambia la vida ganar o perder. Hoy lo tengo clarísimo, el otro día cuando gané (a Thiem), cuando perdí hoy, cuando lo doy todo, me quedo tranquilo, aunque me quedo con una pequeña espina, porque estoy jugando bien", dijo en rueda de prensa Andújar, quien atendió a los medios con una sonrisa.
El conquense residente en Valencia cayó en cinco sets ante Delbonis después de haber firmado la machada del torneo hasta el momento, remontar un 0-2 a Thiem el pasado domingo en primera fase.
"Cosas que pensaba inalcanzables son alcanzables", dijo Andújar, quien, a sus 35 años, reconoció el mérito de remontarle a Thiem. "Antes de te daban puntos extra por eliminar a un top del ránking. Eso me vendría bien ahora", dijo entre risas.
"No he perdido por esa falta de concentración pensando en el partido anterior (triunfo ante Thiem), Debolni es de los rivales más duros en este Roland Garros (...) no hay que desmerecer para nada este nombre", opinó.
De cualquier modo, Andújar detalló que sí que le faltó "esa chispa" que tuvo en el encuentro ante Thiem y reconoció que fue "muy duro el esfuerzo" que le supuso el choque ante el austríaco, que se disputó el domingo y duró 4 horas y 28 minutos.