El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado este jueves que el Gobierno regional "sin dilación" va a pactar nuevos escenarios de planes de empleo y que incluso podría adaptar la normativa para evitar que "estén sometidos y en contencioso permanente con la magistratura de trabajo".
En declaraciones a los medios, antes de visitar el nuevo Hospital Universitario de Toledo, García-Page ha insistido, no obstante, en que a pesar de esa reconversión de los planes de empleo el Ejecutivo castellano-manchego quiere "seguir llegando al mismo número de empleados sin que haya interferencias con políticas ni sindicales ni institucionales".
"Estamos hablando de un trabajo muy especifico, que no puede estar sometido, ni en contencioso permanente con la magistratura de Trabajo.Estamos hablando de planes de choque, de medidas excepcionales para salvar de la miseria laboral y familiar a mucha gente y no podemos estar comparando a los trabajadores de seis meses, para dar salida a una familia, con los que llevan trabajando años y años para la administración conforme a convenio", ha precisado.
"Sí se entiende esa especialidad, habrá consenso. Si no, tendremos que adaptar la normativa porque no vamos a gastar mucho más dinero para contratar a mucha menos gente, porque eso se resuelve convocando ofertas públicas de empleo, convocando pruebas de oposición por mérito y capacidad", ha añadido el presidente castellano-manchego que ha insistido en que las nuevas demandas y nuevos requisitos legales llevarán a pactar nuevos escenarios para dichos planes de empleo.