La directora general de Turismo, Artesanía y Comercio del Gobierno de Castilla-La Mancha, Ana Isabel Fernández, ha confiado este jueves en que la región cerrará 2019 con un nuevo récord de turistas y pernoctaciones.



A preguntas de los medios de comunicación en una rueda de prensa que ha ofrecido en Toledo, Fernández ha señalado que a falta de los datos correspondientes al mes de diciembre, que se conocerán a finales de este mes de enero, los resultados de 2019 "han sido muy buenos".



Tras dos años de crecimiento continuado del turismo alcanzando incrementos de hasta el 23 por ciento en pernoctaciones y visitantes, ha especificado que en 2019 el crecimiento ha sido "más moderado" pero, en cualquier caso, "un año muy bueno" en términos turísticos.



Asimismo, ha deseado que 2020, con los proyectos que ya están previstos e inversiones como la del parque temático Puy du Fou en Toledo, que ya ha provocado una ocupación casi completa para Semana Santa en la capital castellanomanchega, siga dando buenos resultados un sector que -ha destacado- no solo crece en visitantes y pernoctaciones sino también en materia de empleo.

Crecimiento del alojamiento rural

Los establecimientos de turismo rural de Castilla-La Mancha han superado los 282.000 viajeros alojados hasta el mes de noviembre de 2019, lo que supone el mejor registro histórico en este periodo y un crecimiento del 3,5 por ciento respecto al año 2018, dos puntos por encima de la media nacional.



Así lo ha destacado en un comunicado la Consejería de Economía, Empresas y Empleo, que ha informado de que Ciudad Real ha sido la provincia de la región con el crecimiento más alto en este sector, un 28,1 por ciento de incremento que la convierte en la segunda más dinámica del país desde los meses de enero a noviembre.



Según los datos sobre ocupación en alojamientos rurales que ha publicado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE), estas cifras colocan al sector en disposición de cerrar 2019 con el mejor registro en cuanto a demanda de alojamientos de turismo rural en Castilla-La Mancha.



Así, Ciudad Real ha alcanzado un total de 35.265 viajeros entre los meses de enero y noviembre, así como un aumento del 22,8 por ciento en el número de pernoctaciones, con 77.642 en los 11 primeros meses del pasado año.



Además, la demanda en este tipo de alojamientos ha crecido también en este periodo en la provincia de Toledo, con más de 70.000 viajeros, que suponen un ascenso del 11,4 por ciento, y en Albacete, con un total de 67.799 viajeros, un 3,5 por ciento más que en 2018.



Por su parte, la provincia de Cuenca ha registrado un descenso del 10,8 por ciento, con más de 55.000 viajeros, mientras que Guadalajara, con una bajada del 1,5 por ciento, ha recibido la visita de más de 54.000 viajeros alojados en los once primeros meses del año.



Por último, la Consejería ha indicado que el comportamiento favorable de las cifras de turismo rural en la región se ha visto consolidado por los datos del mes de noviembre, en el que el número de viajeros creció en la región un 0,2 por ciento y el número de pernoctaciones aumentó un 8,1 por ciento con respecto al mismo mes de 2018, con cerca de 60.000.