El presidente nacional de Asaja, Pedro Barato, ha asegurado que esta organización agraria ha pedido reunirse con el vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, para analizar los efectos que la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) tendrá en el campo.



Barato, que ha participado este viernes en un foro que ha reunido a cientos de jóvenes agricultores de Castilla-La Mancha en Malagón (Ciudad Real) para hablar de su futuro, ha apuntado que Asaja quiere trasladarle al Gobierno su preocupación por los efectos negativos que esta medida puede tener en la agricultura española.



El presidente nacional de Asaja, en declaraciones a los medios de comunicación, ha señalado que Iglesias es la persona en el Gobierno que está coordinando esas políticas y es con él con el que quieren ver "cómo se puede amortiguar este palo que le ha caído al sector agrario de nuevo".

El campo y la agricultura, ha apuntado Barato, no puede aceptar la subida del SMI después de que el pasado año este sector tuviera una subida muy importante de costes de producción que ha cifrado en un 30%.



"Nosotros siempre hemos apostado por que los trabajadores deben tener un salario súper digno y acorde a las circunstancia, y eso también lo vamos a apoyar, pero también hemos pedido que los producto que pagan esos jornales deben tener un precio digno", ha señalado Barato.



"Si nosotros tenemos una caída del 8,6% en los precios de los productos o si tenemos unos precios en el aceite y en otros sectores complicados, también nos tienen que entender, que nosotros no podamos afrontar el coste de la subida del SMI", ha dicho.



Y ha insistido que Asaja entiende que se debe tener una mano de obra cualificada y bien pagada, pero también el Gobierno debe entender que agricultores y ganaderos deben tener "unos precios bien remunerados de sus producto, para poder cumplir con esas exigencias".



En este sentido, ha comentado que si el Gobierno "puede hacer decretos ley para poner un SMI, también se puede hacer un decreto ley para que no se pueda vender los productos por debajo de su precio de producción".



Además, ha advertido que, de no hacerlo el Gobierno, estaría incumpliendo con el artículo 120 de la Constitución que exige a los poderes públicos que se encarguen de equiparar la renta de los sectores más desfavorecidos, entre ellos, agricultores, ganaderos y artesanos.



A preguntas de los periodistas ha reconocido que el sector agrario ya sufrió el año pasado una pérdida importante de empleo, que ha cifrado en más de 35.000 personas, motivado por el hecho de que los agricultores han decidido apostar por transformar sus producciones de cultivos de mano a cultivos de máquina.



Y ha puesto como ejemplo que sólo en dos explotaciones agrarias de Sevilla se han perdido 8.000 jornales en el campo, debido a que transformaron el cultivo de melocotón que necesita mano de obra por el cultivo de almendra que se cultiva con máquina.

En otro orden de cosas, Barato se ha pronunciado también sobre la próxima oferta de almacenamiento de aceite de oliva y se ha mostrado optimista en que con ella se pueda empezar a recuperar el precio del aceite.



Finalmente, ha reconocido que los meses de febrero y marzo serán decisivos de cara al desarrollo de la Política Agraria Común (PAC), puesto que se abordará de forma decidida su futuro en España.