El Gobierno de Castilla-La Mancha y operadores de telecomunicaciones trabajan para intentar acelerar el despliegue de antenas y fibra óptica en aquellas pedanías que no cuentan con conexión 3G o 4G -la conexión mínima- para facilitar tareas propias del confinamiento como el teletrabajo o las tareas de escolares por Internet, entre otras gestiones.
Así lo ha explicado a Europa Press el director general de Cohesión Territorial de la Junta, Alipio García, que ha precisado que de los 919 municipios, todos tienen cobertura 4G, salvo Bustares, en Guadalajara, cuya antena está en construcción, y de las pedanías, casi el 90 por ciento de ellas cuentan con 3G o 4G.
El despliegue para instalar una antena o el servicio de fibra óptica requiere meses de trabajo en circunstancias normales, y en estos momentos se ha conseguido poner en marcha antenas 3G en pedanías -con el proyecto ya planificado- que lo requerían, siempre respetando las medidas de seguridad.
En concreto, se han puesto en marcha dos antenas 3G en pedanías de los municipios albaceteños de Yeste y Pozohondo, y en próximas semanas llegará la cobertura 4G a las mismas.
Un servicio necesario
Por su parte, la alcaldesa de Yeste, Cortes Buendía, ha agradecido que esta antena pueda estar en marcha porque se trata de un servicio "necesario" durante el confinamiento y en el largo plazo, para mejorar las condiciones de negocios como el balneario de la zona o el camping municipal.
Buendía ha señalado, en declaraciones a Europa Press, que "hay días" que necesita trabajar desde casa, o su hijo, que está estudiando y recibe algunas tareas por Internet, o vecinos que tienen que "teletrabajar", por lo que es vital estar conectados.
La primer edil ha agradecido el esfuerzo del Gobierno regional por facilitar esta conexión 3G, ya comprometida por el presidente, Emiliano García-Page, después de que se produjera el incendio de 2017. Buendía ha precisado que la zona que más problemas puede presentar por su orografía es el núcleo de Tus.
Además, ha manifestado que aunque algunos de desplacen a la zona para "desconectar", a raíz de la crisis sanitaria del COVID-19 se están dando cuenta de que es necesario "estar conectado".
Pocas incidencias
El director de Cohesión Territorial del Gobierno de Castilla-La Mancha ha señalado que desde que el pasado 14 de marzo se decretara el estado de alarma no se han contabilizado incidencias graves; solo siete de menor importancia, cinco de ellas relacionadas con el suministro eléctrico y las restantes vinculadas a fallos electrónicos en la antenas, cuestiones que se han solventado en un plazo de 24 horas. "Todo dentro de los fallos de una red normal", ha afirmado.
Además, ha mencionado que en la zona sur de Cuenca y norte de Albacete, un operador detectó que su red estaba llegando a límites muy altos de ocupación por el tráfico de datos, por lo que el Gobierno regional trabajó con este operador y en tres días consiguieron reforzar la red con una nueva canalización de fibra óptica, y que en estos momentos "están funcionando muy bien".
También se ha congratulado de las grandes tormentas de la primera semana no haya generado incidencias en la red, pues son la causa más común en el origen de las mismas.
García ha destacado que se realiza un "seguimiento muy exhaustivo" en el servicio de telecomunicaciones, pues su departamento va llamando "uno a uno" de los operadores con los que trabaja la Junta. Se cifran en 62 los regionales, que se suman a los locales y nacionales.
Repunte del tráfico
Respecto al tráfico de datos, en la primera semana de confinamiento se produjo un repunte de 45 por ciento en Castilla-La Mancha, en la segunda semana descendió "un poco" el consumo medio y en la tercera semana ha vuelto a aumentar.
En las próximas reuniones del Gobierno regional se abordarán proyectos de colaboración con operadores de telecomunicaciones, así como medidas de apoyo para generar un mayor ancho de banda, necesarios para determinadas acciones como el teletrabajo o la impresión en 3D.
En este punto, García ha mencionado que en el hospital de Valdepeñas se ha incrementado las tarjetas SIM o terminales para que los enfermos puedan hablar con familiares, o en la zona de Urda (Toledo) se ha requerido mayor conexión para las impresoras 3D que están trabajando en la creación de caretas.
También, con datos que está recabando la Consejería de Educación, ayudarán a llevar la conectividad a aquellos alumnos confinados en sus domicilios que no tienen la conexión idónea para realizar tareas escolares online.