La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Castilla-La Mancha ha considerado que la estrategia 'De la Granja a la Mesa' no da "ninguna alternativa" a los viticultores, sino que "impone una serie de condiciones".
Así se ha pronunciado el responsable de Vino de UPA en la región, Alejandro García-Gasco, tras participar en la reunión del COPA-Cogeca donde se ha debatido esta estrategia, según ha informado la organización agraria en nota de prensa.
"No es solo una cuestión medioambiental", indican desde UPA, ya que los agricultores son "los primeros interesados en defender el medio ambiente y la tierra de la que vivimos". "Pero si esto va más allá de lo que supone el greening, si las exigencias son cada vez más duras, será imposible la viabilidad de los viñedos de Castilla-La Mancha. Así de claro", ha dicho García-Gasco, quien ha matizado que es fundamental amortiguar estas exigencias, y no son actuaciones a corto plazo.
"Los leñosos necesitan un periodo transitorio superior. No podemos quitar los pesticidas de un día para el otro, nuestras herramientas de lucha contra las plagas", ha manifestado, unido al hecho de que no todos los agricultores podrán acogerse y pasarse al ecológico, pues se corre el riesgo de saturar el mercado. "Eso sin tener en cuenta la crisis económica y social que atravesamos que perjudica más aún a este tipo de consumo", ha apostillado.
Pesimismo
Tras la reunión sobre la estrategia 'De la Granja a la Mesa', el sector puede mostrarse pesimista, pues obligará a los viticultores a hacer un sobreesfuerzo "considerable", con acciones como pasar a ecológico, reducir la gradación del vino, o fabricar vino sin alcohol, entre otras exigencias como las referidas a los productos fitosanitarios. "Nos mostramos pesimistas porque nos condena a la reducción de viñedo en zonas donde no hay otra alternativa, viñedo en pendiente, en terrazas, de bajo rendimiento, donde no puede plantarse otra cosa y correrá el riesgo de quedar abandonado", ha sentenciado el responsable de Vino de UPA.
Desde la UPA recuerdan que tras la reunión del COPA-Cogeca, al pedir fondos para sufragar estas exigencias añadidas, han contestado que "ya están los fondos de apoyo Pasve". UPA ha denunciado que este Plan ha sufrido un recorte de 8 millones de euros, de 210 a 202 millones. De ahí, han explicado, la Comisión Europea obligará a utilizar un porcentaje mínimo de fondos para sufragar la estrategia 'De la Granja a la Mesa', pero "¿a quién se lo quitamos, a la promoción, a la restructuración, a las inversiones?".
Así de "complicado" se muestra el futuro, según UPA, pues el sobreesfuerzo y el mercado actual, con la crisis económica social y sanitaria, no será capaz de pagar esos extras que exige la Unión Europea. "Más teniendo en cuenta que vamos a tener las puertas abiertas a productos de otros países que no cumplen las exigencias de la UE para nada. Las mismas exigencias a las que nos obligan a partir de ahora", han concluido.