El Ayuntamiento y la Diputación de Albacete exploran líneas de colaboración con el sector ganadero de reses bravas, seriamente dañado por los efectos económicos y sociales de la pandemia.
El alcalde de Albacete, Vicente Casañ, y el presidente de la Diputación, Santi Cabañero, han tenido ocasión de conversar con Elena González y José Antonio Galdón 'Niño Belén', en nombre de las ganaderías de reses bravas que se localizan en el territorio provincial y que, como han insistido, en mayor o mayor medida, vienen sufriendo importantes dificultades para poder seguir dando de comer a sus animales y mantener su ganado cuando se cumple el primer año de una pandemia.
Entre otras cuestiones, ha provocado "la paralización de la actividad que les venía permitiendo mantener a sus reses en el campo y que, han asegurado, está poniendo en serio riesgo la viabilidad de muchas explotaciones (que han de asumir elevados costes de producción)", ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.
Los ganaderos han explicado ante las autoridades las dificultades que están atravesando estos meses, hasta llegar a una situación a la que cada vez se les hace más difícil hacer frente, por "el profundo daño que la falta de recursos ha dejado", de ahí que hayan solicitado apoyo que les permita mirar por sus animales y por el valor ecológico que aporta la dehesa allí donde se asienta.
Todo ello, "para intentar paliar esa profunda huella que la pandemia está causándoles, y en tanto que las condiciones epidemiológicas permitan que la actividad pueda ir retomándose con el peso suficiente, como para remontar la situación".
Total disposición
Tras escuchar la situación en la que se encuentra el sector, Casañ y Cabañero han mostrado su total predisposición a buscar la forma de articular mecanismos de colaboración que, en el ámbito de "las limitadas competencias" de sus respectivas administraciones en este sentido, puedan contribuir a aliviar los efectos negativos que la crisis sanitaria viene provocando también en este tipo de ganaderías, y a continuar atendiendo a las reses que suponen el sustento para muchas familias en el conjunto del territorio albaceteño.
En la reunión, se ha analizado el importante impacto socioeconómico que la ganadería de reses bravas tiene en territorios como la provincia de Albacete, tanto en la capital donde se asientan varias ganaderías, como en el medio rural, así autoridades y ganaderos han coincidido en la necesidad de protegerla, ya que también contribuye a generar empleo -tanto directo, como indirecto- y, por ende, al mantenimiento de muchas familias y a la fijación de población en las zonas donde se asienta.
Tras esta toma de contacto, el alcalde y el presidente de la Diputación se han comprometido a materializar esa colaboración en fechas próximas, una vez se acuerden las fórmulas idóneas en coordinación con la representación del sector ganadero.