El límite de 1.000 euros a los pagos en efectivo que el proyecto de Ley de lucha contra el fraude fiscal pretende introducir supone un ataque directo al medio de pago utilizado mayoritariamente en España, han advertido desde las organizaciones del sector comercialANGED, CEC, ACOTEX, FECE. En concreto, según datos del Banco Central Europeo,el 83% de las operaciones de compra en España son en efectivo,diez puntos más que la media europea.
El dinero en efectivo es un medio de pago emitido y garantizado por los Estados, por eso, el sector del Comercio señala que no se puede poner bajo sospecha de delito el uso de la moneda en curso legal por parte de los ciudadanos.
Limitar los pagos en efectivo a 1.000 euros representa una barrera innecesaria al consumo, confirma el sector. Supone sustituir el dinero en efectivo garantizado por los Estados por otros medios de pago que tiene un elevado coste para ciudadanos y comerciantes, como los ocasionados por las comisiones del pago y la posesión de tarjeta.
El Comercio comparte el objetivo de la lucha contra el fraude fiscalen España, porque penaliza la competitividad de las empresas que operan dentro de la Ley. Sin embargo, parece desproporcionado implantar un límite tan bajo para las operaciones en efectivo y a la propia libertad de elección por parte del consumidor, poniendo bajo sospecha a cualquier cliente que realice compras en el comercio por valor superior a 1.000 euros.