El salario medio anual por trabajador en Castilla-La Mancha bajó en 2020 un 0,1%, hasta los 20.399 euros, y se sitúa 2.438 euros por debajo del salario medio anual del conjunto del país, que fue de 22.837,59 euros, un 2,6% menos que el año anterior y marcó la menor cifra desde 2017.
Con motivo de las medidas adoptadas en 2020 para hacer frente a la pandemia, convivieron trabajadores que percibían salarios con otros acogidos a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que seguían perteneciendo a las plantillas de sus empresas pero que eran remunerados total o parcialmente con prestaciones del SEPE, según la Encuesta Anual de Coste Laboral que publica este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Así, la masa salarial percibida no guardó relación con el número de empleados, de forma que, para el INE, el salario medio está "distorsionado" y su comparación con 2019 no es "apropiada". Con todo, el coste salarial supone el 73,3 % del coste total por trabajador en el que incurren las empresas, que se situó en los 31.150,220 euros brutos mensuales tras disminuir un 2,1 %, tras tres años de incrementos.
El coste neto fue de 30.965,76 euros por trabajador, una vez deducidos 184,44 euros en concepto de subvenciones y deducciones recibidas de las Administraciones Públicas para fomentar el empleo y la formación profesional. La partida más importante de los costes no salariales fueron las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social (7.335,87 euros por trabajador) que representaron el 23,6 % del coste total. Del resto de partidas que componen el coste, 561,45 euros anuales por trabajador se destinaron a beneficios sociales, 206,27 a gastos derivados del trabajo, 153,45 correspondieron a indemnizaciones por despido y 55,57 a formación profesional.
En el caso de Castilla-La Mancha, el coste neto anual por trabajador fue de 27.823,93 euros, un 0,1% más que el año anterior, y del total, 20.399 euros corresponden a sueldos y salarios y 7.424,65 euros es coste no salarial, como cotizaciones obligatorias (6.869 euros), cotizaciones voluntarias (103,94 euros) o prestaciones sociales directas (321,07 euros), entre otros conceptos.
Sueldo en la energía
Por sectores, el salario bruto anual más elevado es el de la industria (26.753 euros), seguida por la construcción (22.624 euros) y los servicios (22.159 euros).
Las actividades económicas con mayor coste laboral anual fueron suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (79.544,22 euros), actividades financieras y de seguros (66.843,52) e información y comunicaciones (54.195,06). Por el contrario, hostelería (13.323,24 euros), otros servicios (20.807,73) y actividades administrativas y servicios auxiliares (21.192,04) tuvieron los costes más bajos.
Esta distribución por actividades se da también en los salarios, de forma que el sueldo medio bruto anual de un trabajador del sector energético alcanzó los 60.352 euros en 2020, cifra seis veces superior (51.000 euros más) a la de un empleado en la hostelería, que ganó de media 9.377 euros. Por regiones, los costes laborales más elevados se dieron en Madrid, (37.124,53 euros), País Vasco (36.867,25) y Navarra (34.508,28), mientras que Extremadura (24.062,13), Canarias (25.051,16) y Andalucía (27.003,07) tuvieron los más bajos.
La encuesta muestra además que el 94,7 % de los centros de trabajo, que representan al 86 % de los trabajadores, regularon sus relaciones laborales mediante un convenio colectivo y, de ellos, 1,8 %, que representan al 3,3 % de los trabajadores, modificaron sus condiciones de trabajo durante el año 2020.