La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha participado este martes en Málaga en una concentración convocada junto a CIC y UGT para defender el empleo en Unicaja Banco y contra los despidos masivos en la entidad, que en Castilla-La Mancha afectan a 261 empleados y suponen el cierre de 144 oficinas, según los planes de la entidad denunciados por CSIF.
Alrededor de 2.000 personas han participado en esta primera concentración dentro del calendario de movilizaciones fijado por la representación sindical de Unicaja Banco contra el ajuste que afectará a un total de 1.513 trabajadores en el conjunto del país. En concreto, esta primera movilización ha tenido lugar en la Avenida de Andalucía de Málaga, donde se ubica la sede central de la entidad.
En detalle, los despidos planteados por Unicaja Banco afectan a 95 trabajadores en Ciudad Real; 67 en Toledo; 47 en Cuenca; 46 en Albacete y 6 en Guadalajara.
El calendario de protestas se inicia después de que la empresa no haya mostrado ninguna voluntad negociadora. Asimismo, la Central Sindical rechaza medidas traumáticas y considera un despropósito el planteamiento de la empresa, máxime cuando tras la fusión con Liberbank, Unicaja Banco ha obtenido un beneficio neto de 1.395 millones de euros hasta el pasado septiembre, 12 veces más que en el mismo periodo de 2020.
Proceso voluntario
CSIF exige que todo el proceso sea voluntario y lamenta que hasta el momento la dirección de la entidad no haya afrontado las negociaciones con respeto y responsabilidad hacia una plantilla profesional que lleva años trabajando y sacrificándose, incluso en épocas de crisis económica y pandemia.
Tras su fusión con Liberbank, el nuevo Unicaja Banco anunció a los sindicatos un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará al 15% de la plantilla y supondrá el cierre de 395 sucursales en toda España, un 28 por ciento de su red.
El calendario de movilizaciones prevé nuevas concentraciones el 23 de noviembre y el 1 de diciembre, así como dos jornadas de huelga: los días 26 de noviembre y 1 de diciembre.
Para CSIF constituyen líneas rojas infranqueables la voluntariedad en las salidas, así como el rechazo absoluto a medidas impuestas de forma unilateral por la empresa. Igualmente, el sindicato expresa su repulsa ante cualquier discriminación por edad y territorio a la hora de poder acogerse a extinciones de contratos y aboga por la implantación de condiciones dignas ante casos de movilidad geográfica o bajas en la empresa.