La inflación está disparada. En agosto subió un 10,5%, unas décimas más que lo previsto por el Instituto Nacional de Estadística en su dato adelantado. Sin embargo, la escalada precios fue todavía mayor en determinadas provincias especialmente marcadas por la despoblación. De hecho, los datos del INE demuestran que la inflación es más elevada todavía en la 'España vaciada', según informa Eduardo Ortega en El Español.
El 'top ten' de la inflación española está formado por provincias con una importante presencia de municipios rurales o áreas en despoblación. Toledo y León, que son las provincias en las que más ha crecido la inflación en agosto (un 13,3% y un 13,1%), son precisamente territorios que pertenecen a las autonomías con menor cantidad de población por kilómetro cuadrado, que son Castilla-La Mancha y Castilla y León.
El panorama no cambia en los siguientes puestos de este particular ranking. Ciudad Real, con un 12,9%, y Ávila (12,5%), son las siguientes provincias con mayor nivel de inflación.
A continuación aparecen Cuenca (12,4%) y Lérida (12,2%). Cabe recordar que en el territorio catalán hay hasta 89 municipios en riesgo de despoblación. El 'top 10' provincial se completa con Albacete (12%), Zamora (11,9%), Guadalajara (11,9%) y Badajoz (11,9%).
En el lado contrario, las tres provincias en las que menos han subido los precios se cuentan entre las más pobladas de España. Se trata de Santa Cruz de Tenerife (8,9%), Madrid (9,3%) y Barcelona (9,7%).
En términos generales, las regiones en las que más creció el IPC anual fueron Castilla-La Mancha y Castilla y Léon, con un 12,6% y un 11,8%, respectivamente. Las autonomías en las que menos aumentaron los precios fueron la Comunidad de Madrid y Canarias, con un 9,3% y un 9,5%, respectivamente.