Un estudio laboral realizado por UGT ha puesto de relieve que casi 69.000 trabajadores de Castilla-La Mancha sufren lo que se denomina "subempleo", es decir, un trabajo dotado de un número de horas insuficiente a cambio de un bajo salario. Se trata de un grave déficit estructural del mercado de trabajo que, a pesar de la reforma laboral de 2021, supone, según UGT, "una injusta distribución del tiempo de trabajo".
Los datos del estudio de este sindicato evidencian que un total de 68.658 trabajadores están sometidos actualmente en Castilla-La Mancha a esta modalidad de empleo, lo que significa un 4,2 por ciento de los asalariados de la región y un 9,2 por ciento de incidencia en el mercado laboral, por encima de la media nacional que es del 8,5 por ciento, tal como ha explicado Isabel Carrascosa, responsable de Empleo de UGT CLM.
Carrascosa asegura, en este sentido, que las mujeres están afectadas por esta situación "en mayor medida" que los hombres, además de que la mitad de los empleos a tiempo parcial son "involuntarios".
Posición desfavorable
En este sentido, la comparativa respecto al promedio europeo deja a España en una posición muy desfavorable. Por otra parte, si se amplía el foco de los motivos que explican esta parcialidad, más allá de la falta de oportunidades para trabajar a jornada completa, se constata como el 20 por ciento de las personas ocupadas a tiempo parcial los son por razones de cuidados u obligaciones familiares.
“Aquí vemos como nuevamente las mujeres son las más perjudicadas. Hasta un 25 por ciento de las empleadas a tiempo parcial lo son por la obligación de desempeñar trabajos domésticos, un porcentaje que desciende a un 8,2 por ciento en el caso de los hombres”, pone de relieve Isabel Carrascosa.
Con estos datos, el estudio de UGT refleja que un 11 por ciento de las mujeres asalariadas están subempleadas. Y la población extranjera es la más afectada por el desempleo. Otro de los colectivos más vulnerables a esta situación es el de los jóvenes, ya que el 41,9 por ciento de las personas subempleadas tienen menos de 30 años.
La importancia de la formación
Además, explica el estudio ugetista, a mayor formación, menor probabilidad de sufrir subempleo, de manera que son "las ocupaciones elementales, como es el caso de la restauración, las más castigadas por el subemplleo". Isabel Carrascosa incide, en este sentido, en las consecuencias negativas de esta situación para la población trabajadora.
“Todo esto tiene unas consecuencias socioeconómicas muy negativas. Por un lado, genera pobreza laboral y también se observa como el pluriempleo ha terminado consolidándose como una de las respuestas más frecuentes para luchar contra la insuficiencia de ingresos", dice la responsable del sindicato.