Castilla-La Mancha ya tiene su nuevo Plan Estratégico de Turismo 2024-2030 con el que se pretende dar un salto de calidad y cantidad y alcanzar un nuevo estatus en el contexto turístico nacional a lo largo de los próximos seis años. El proyecto, presentado este lunes en Belmonte (Cuenca) por el presidente de la Junta, Emiliano García-Page, ha contado con la participación de más de 600 personas del ámbito turístico y contiene 20 grandes objetivos, nueve líneas estratégicas y 59 actuaciones concretas para cumplir el objetivo de promover un crecimiento económico sostenido en todo el sector.

Page ha pronosticado que el turismo "no va a dejar de crecer" en los próximos años en Castilla-La Mancha y ha asegurado que la mayor parte de este crecimiento se va a producir en los ámbitos del patrimonio histórico y la cultura, "que la región tiene a raudales". El presidente ha dicho que el turismo es un sector "clave" en la comunidad y que, a corto plazo, va a ocupar "más trozo" de la tarta de la riqueza de la región, situada actualmente en un 7,4 por ciento del PIB y un 8,6 por ciento del empleo, con un total de 2,9 millones de viajeros a lo largo del pasado año.

García-Page ha destacado, además, el hecho de que la industria turística "no deslocaliza" y sí enriquece el territorio, por lo que la apuesta del Gobierno de Castilla-La Mancha es firme en esta dirección. "El turismo es esencial", asegura el presidente de la Junta, quien ha elogiado a la consejera de Economía y Empleo, Patricia Franco, por su papel fundamental en la elaboración de este plan. "No deja de darme alegrías", ha dicho Page, señalando también el trabajo de la directora general de Turismo, Ana Isabel Fernández Samper.

Una estrategia pactada

"Leer y viajar es lo mejor que se puede hacer para cultivarte. Soy un viajero empedernido. Lo recomendaría a todo el mundo", ha apuntado el presidente de Castilla-La Mancha. A su juicio, este nuevo Plan Estratégico de Turismo de la región "es ambicioso pero posible" y está centrado en ofrecer "cultura, patrimonio, gastronomía, incluso sociabilidad", una estrategia "pactada" con un sector que es fundamental en la economía regional y con ambiciones "realistas porque están negociadas y porque en su ejecución van a ir de la mano".

Entre las estimaciones de este nuevo Plan Estratégico se incluye la previsión de que Castilla-La Mancha reciba en el año 2030 un total de 3,5 millones de viajeros con 7 millones de pernoctaciones, con un incremento del 18 y el 23 por ciento respectivamente que vendrá, sobre todo, del turismo extranjero. Potenciar la economía regional, frenar la despoblación y profesionalizar aún más el sector son algunos de los objetivos planteados, además de dar un impulso al patrimonio histórico.

Por su parte, la consejera ha recordado que Castilla-La Mancha ya puso en marcha estrategias similares en el pasado que han dado buenos frutos hasta ahora, entre ellas el dato de que la comunidad acapara el 10 por ciento del turismo rural en España, con "las mayores cifras de empleo" en el año 2023. En mayo, ha explicado Patricia Franco, han sido más de 53.000 los trabajadores del sector turístico en la región, en un capítulo que por cada nómina genera 36 más de forma indirecta.

Fuerte crecimiento

Tras el primer plan estratégico, ha dicho la consejera, son ya 4.000 ofertas nuevas dentro del catálogo de Castilla-La Mancha, el 99 por ciento en materia de turismo rural. Como ejemplo, ha puesto el "músculo" creado por la región por parte del sector, con más de 5.000 establecimientos hoteleros y más de 83.000 plazas, "un crecimiento de 20.000 plazas más en alojamientos en la región".

En la actualidad, Castilla-La Mancha está desarrollando 27 los planes de sostenibilidad turística a lo largo de toda la región, planteamientos que "apuestan por la innovación" en sus lugares de influencia. "Los mimbres están puestos", ha dicho la consejera. Desde el año 2015, Castilla-La Mancha ha aumentado en 500.000 el número de turistas que llegan a la región, con 2023 como "el mejor año de la historia".

Del total de 2,9 millones de viajeros el pasado año, el 77,5 por ciento se alojaron en hotel y el 13,6 por ciento en alojamiento rural, con un 85,3 por ciento de turistas nacionales y Madrid como principal región de origen, con un 26,9 por ciento, seguida de Comunidad Valenciana, Andalucía y Cataluña. Los viajeros internacionales proceden fundamentalmente de Francia, Portugal, Reino Unido e Italia. El pasado mes de mayo se alojaron en Castilla-La Mancha un total de 238.000 viajeros, el mejor mes de mayo de la serie histórica.

El lugar ideal

La alcaldesa de Belmonte, Cristina Delgado, por su parte, ha ejercido de anfitriona en el acto y ha aprovechado para reivindicar su pueblo como "el lugar ideal" para esta presentación, además de ser "un honor". Belmonte, ha dicho, "es uno de los culpables" de los buenos datos turísticos, con 400 plazas hoteleras y dos monumentos que son Bien de Interés Cultural.

Fueron más de 60.000 personas las que cruzaron la puerta de un pueblo que "no es sólo su Castillo", ya que hay "múltiples encantos y servicios, y un sector de hostelería que no deja de innovar". La alcaldesa ha puesto también en valor el trabajo de los negocios de la localidad, "que generan riqueza y crean empleo". Igualmente, ha destacado los 1,4 millones de euros recibidos para un plan de sostenibilidad turística, herramienta que "hará que Belmonte se consolide como destino turístico".

"Tengo ganas y un equipo perfecto para trabajar. El turismo es un pilar fundamental, y cada visitante que llega contribuye a enriquecer nuestra empresa turística y a impulsar el dinamismo económico", ha señalado la alcaldesa belmonteña.

De la mano del sector

Finalmente, el presidente de la asociación regional de Hostelería, David Giménez, ha tomado la palabra para aplaudir este tipo de estrategias, toda vez que "hostelería y turismo son los ejes" de la región, y eso requiere que todos los sectores "vayan de la mano".

Los empresarios "han trabajado en el desarrollo del plan aportando sugerencias e ideas", con avances "importantes" que han llevado a la región a colocarse "como uno de los mejores destinos de turismo interior".

"Tenemos mucho por hacer, tenemos espacios naturales espectaculares, cultura, historia y tradición, y por supuesto una gran gastronomía", ha reivindicado. Con todo, ha pedido "no bajar la guardia" porque "queda mucho por hacer", ya que los empresarios "quieren ser partícipes" del éxito de la región.