El Ayuntamiento de Toledo cerró el ejercicio de 2023 con un superávit de 5,39 millones de euros y un remanente de Tesorería para gastos corrientes de 19,83 millones.
Así lo recoge la Cuenta General del Ayuntamiento de Toledo del pasado ejercicio que fue aprobada ayer en Comisión con el único voto en contra de Izquierda Unida-Podemos. Su portavoz, Txema Fernández, argumentó el sentido de su voto recordando que su formación tampoco apoyó los presupuestos del ejercicio, los últimos de Milagros Tolón como alcaldesa de Toledo.
La memoria que recoge la salud financiera del Ayuntamiento revela que, pese a la inexistencia de déficit, los números verdes van menguando hasta situar el superávit por habitante en 63,37 euros. Y es que en 2022 el resultado presupuestario ajustado alcanzó los 9,21 millones de euros. Es decir, la reducción ha sido del 41,47% en tan sólo un año.
No obstante, el balance consolidado en el que se incluyen los patronatos municipales como del Deportivo, el de Turismo, el de Música y el del Teatro de Rojas y los resultados de la Empresa Municipal de la Vivienda, presenta un superávit de 14,56 millones al registrarse unos derechos reconocidos netos de 136,17 millones y unas obligaciones de 121,60 millones.
Remanente de Tesorería a la baja
Por lo que se refiere al remanente de Tesorería, éste ha experimentado un notable retroceso a lo largo de 2024. A finales del segundo trimestre, de los 19,83 millones de euros disponibles ya se habían utilizado 15,88 millones de euros. Es decir, sólo quedaba disponibles 3,94 millones.
La Cuenta General del Ayuntamiento de Toledo, que será aprobada este jueves en Pleno, para ser enviada a la Cámara de Cuentas de Castilla-La Mancha para su fiscalización, presenta otros datos interesantes.
Entre ellos destacan los ingresos tributarios. En total, el Ayuntamiento de Toledo, contando con la actividad de los patronatos, obtuvo el año pasado unos ingresos consolidados de 48,22 millones de euros en impuestos tanto directos como indirectos. A esta cantidad hay que agregar otros 21,25 millones en concepto de tasas. En total, 69,47 millones, a los que hay que sumar otros 3,32 millones que a 31 de diciembre estaban pendientes de pago. Es decir, la presión fiscal media por habitante alcanzó los 855 euros en 2023.
9 millones para la Policía Local
En su conjunto, los ingresos netos municipales, incluidas las transferencias corrientes y los pasivos financieros, ascendieron a 125,23 millones de euros. Los pagos se quedaron en 118,15 millones. No obstante, las obligaciones reconocidas netas sumaron 121,60 millones de euros por lo que el gasto por habitante ascendió a 1.429,22 euros.
La memoria de la Cuenta General también reseña los costes de los servicios que presta el Ayuntamiento. Así, el servicio de bomberos supuso un coste anual para las arcas municipales de 5,89 millones de euros, mientras que el de la Policía Local alcanzó los 9,36 millones. Por lo que se refiere a los servicios públicos municipalizados el Ayuntamiento de Toledo destinó 8,28 millones a la limpieza viaria, 7,3 millones al transporte urbano, 5,21 millones a la recogida de basuras, 3,3 millones a la limpieza de colegios, 2,85 millones a la ORA y 1,37 millones a la Ayuda a Domicilio.
En cuanto al esfuerzo inversor, los derechos reconocidos netos ascendieron a 18,20 millones de euros por lo que la inversión por habitante alcanzó los 213 euros.
Estado de la deuda
La deuda que el Ayuntamiento de Toledo mantenía a finales de 2023 ascendía a 21,44 millones de euros. De esta cantidad, 1,66 millones corresponden a las devoluciones pendientes que debe realizar al Ministerio de Hacienda por las liquidaciones negativas de 2008, 2009 y 2020. A esta cifra hay que sumarle los 11 millones que en principio el Ayuntamiento de Toledo deberá abonar por las expropiaciones realizadas para construir el Nudo Norte, al asumir en solitario los compromisos de la disuelta ‘Toletum Visigodo’ y el saldo vivo de préstamo concedido por una entidad financiera, que asciende a 7,94 millones de euros.
A estos 19,78 millones hay que sumarle otros 7,99 millones de euros de un último crédito que no aparece en la contabilidad al haberse suscrito, pero al no quedar ingresado al cierre del ejercicio en las arcas municipales.