Las lluvias "han salvado" por el momento la cosecha más temprana, la de la comarca de la Campiña en Guadalajara, zona que limita con Madrid, pero también ha venido "muy bien" a los cultivos de secano en las zonas más tardías de la provincia como son la Alcarria, Serranía y Molina de Aragón.
Así lo ha manifestado a Europa Press el gerente de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Guadalajara (APAG), Antonio Torres, quien cree que la recolección "ya está garantizada", aunque espera que "venga más agua" y que las temperaturas se mantengan suaves y no hiele porque si "pilla" al cereal en flor podría ser "un desastre".
"Al agricultor se le ha vuelto a poner la sonrisa en la cara", ha sentenciado Torres, satisfecho de que, con el agua que ha caído hasta el momento, "por lo menos" podrán cosechar, pero augura que si en lo que resta de abril y en mayo hay más lluvias, la recolección será mejor. Según el gerente de APAG, hasta ahora "no se movían los abonos" al campo porque los agricultores no se atrevían por miedo ante una cosecha dudosa, pero ha subrayado que el sector ya ha comenzado a echar los nitratos y herbicidas "con alegría".
En todo caso, aunque las heladas y el pedrisco no están afectando por el momento a los cereales, aunque sí ha comenzado a afectar algo al espárrago, lo que se traduce en que, en algunas zonas, "han estado tres o cuatro días sin cortar hasta que han salido los nuevos tallos". Por lo que respecta al cultivo de la colza, lleva un ciclo muy adelantado y parece que no a va a dar la producción de otros años ya que, al estar en flor ya, las heladas le están afectando.
El pasado año se plantaron casi 7.000 hectáreas de colza y este año se han puesto 4.000 sobre una superficie total cultivable en la provincia de 250.000 hectáreas de las que el grueso, unas 180.000, son de cereal, y unas 30.000 de girasol. La superficie cultivable no ha variado en años pero sí hay menos agricultores al cargo, algo que en opinión de Torres se debe tanto a que cada vez hay menos gente en el medio rural pero también a que la maquinaria ha mejorado y con menos se hace más.