Cerca de 6.000 agricultores de la provincia de Ciudad Real, según las organizaciones agrarias, han cortado una de las principales vías de comunicación del país, la autovía A-4, que une Madrid con Andalucía, para recordar al Gobierno que la crisis del campo sigue "sin alivio y sin soluciones a sus problemas".
Los agricultores han colapsado autovía A-4 en Manzanares y Valdepeñas, la Autovía de los Viñedos (CM-42) en Socuéllamos y la Autovía A-43 en Manzanares con cientos de tractores, para reclamar precios justos que hagan rentables sus explotaciones y una Política Agraria Común (PAC) que atienda sus necesidades y evite que la despoblación siga vaciando los municipios de la España vaciada.
Las organizaciones ASAJA, COAG y UPA, convocantes de esta manifestación, ha provocado el corte de la A-4 en Manzanares a la altura del kilómetro 171, el corte de esta misma carretera en el kilómetro 197 en Valdepeñas, y el corte de la Autovía de los Viñedos (CM-42), entre los kilómetros 121 y 123.
Además, los agricultores también han cortado la línea férrea que une Levantes con Andalucía y Andalucía con Levante, al concentrarse en la estación de ferrocarril de Socuéllamos que ha quedado cerrada al tráfico ferroviario.
Los agricultores también han llegado a cortar la Autovía A-43 que une Extremadura con Levante a su paso por Manzanares, aún cuando este corte no estaba autorizado, lo que ha provocado los momentos de mayor tensión entre los agricultores y agentes de la Guardia Civil.
La manifestación, que ha sido previamente autorizada por la Subdelegación del Gobierno, ha contado con el apoyo también de ganaderos que creen necesario que los precios se deben regular por ley, según ha dicho a Efe Manuel Pedraza, agricultor de Villarrubia de los Ojos.
Éste ha advertido de que regular los precios es una medida necesaria para controlar a las cadenas distribuidoras y evitar así las especulaciones que actualmente se producen en muchos productos, cuyos precios, han dicho, "puedan llegar a subir un 500% su precio desde que el agricultor lo vende hasta que lo compra el consumidor final", ha comentado.
Las organizaciones agrarias, han señalado a Efe, quieren mantener su pulso en las carreteras y las calles de España para seguir dando visibilidad a unas reclamaciones que consideran justas y que no pueden caer en el olvido ni del Gobierno ni de los partidos políticos.
Por su parte, el presidente de Asaja Ciudad Real, Florencio Rodríguez, ha asegurado a preguntas de los periodistas que el paquete de medidas urgentes para el campo aprobado por el Gobierno a finales del mes de febrero es insuficiente para solventar la crisis del campo.
Medidas como el refuerzo de los mecanismos de control sobre los costes asociados a la producción y venta de alimentos e introducen nuevas exigencias a las promociones en los supermercados, ha comentado, "no solucionan el problema y deben venir acompañados de otras medidas, porque las actuales sólo se pueden considerar un gesto".
Rodríguez, que ha justificado las movilizaciones de los agricultores y ganaderos, ha comentado que éstas no pararán mientras que la administración no dé una solución definitiva a sus problemas.
Además, en declaraciones a Efe, el secretario regional de UPA, Julián Morcillo, ha asegurado que los agricultores y ganaderos no pueden permanecer impasibles ante la reforma de la PAC o la decisiones del Gobierno de EEUU de aplicar aranceles a sus productos, que dificultan mucho su actividad.
Morcillo ha apuntado que las organizaciones agrarios solo piden que "se garantice los costes de producción y se respete un sector tan importante como el agroalimentario, que representa en Castilla-La Mancha un tercio de la riqueza que se genera en la región".
Fuentes de Renfe han informado a Efe de queun total de cinco trenes de media y larga distancia se han visto afectados este lunes por las protestas que protagonizan los agricultores en la provincia de Ciudad Real, ya que han cortado la circulación ferroviaria a la altura de la estación de Socuéllamos.
En concreto, se han visto afectados dos trenes de larga distancia que cubren el recorrido Madrid-Cartagena, cada uno en un sentido, y tres de media distancia, dos de ellos del trayecto Madrid-Cartagena y uno de la línea Ciudad Real-Alicante.
Estas mismas fuentes han precisado que el corte de la circulación se ha prolongado durante unas dos horas, si bien los trenes han acumulado un retraso máximo de unos treinta minutos.