Este miércoles se ha celebrado la décima y última Lonja de melón y sandía de Castilla-La Mancha, estableciendo un precio medio de campaña del melón de 0,27 euros por kilo y de 0,23 euros por kilo para la sandía. "Precios estables y razonables", ha señalado el presidente de la Interprofesional, Cristóbal Jiménez, en un año atípico por el reto que planteaba el COVID-19 a los trabajadores del campo. En este sentido, la campaña ha transcurrido con normalidad gracias al compromiso de los productores y comercializadores. "No hemos tenido problemas para encontrar mano de obra y tampoco hemos tenido que lamentar ningún brote de contagios importante ni las explotaciones ni en los almacenes", ha destacado Jiménez.
En términos de producción, la campaña termina con unas 220.000 toneladas recolectadas de melón, tras haber sembrado este año más de 5.800 hectáreas en nuestra región, algo menos que en años anteriores. En el caso de la sandía, se han recogido alrededor de 180.000 toneladas, después de haber plantado más de 2.700 hectáreas en Castilla-La Mancha. Unas "cifras que el mercado ha absorbido sin problemas, y sin que hayamos tenido que hacer frente a los temidos dientes de sierra", ha recordado el presidente de la Interprofesional, según ha informado esta organización en nota de prensa.
Para Jiménez, la clave para conseguir un año como éste, "de los mejores desde que hace ocho venimos celebrando las Mesas de la Lonja del melón y sandía en Castilla-La Mancha", es ajustar la oferta a la demanda. Asegura que "cuando esto ocurre, se redistribuye el beneficio entre todos los eslabones de la cadena, sin cargar al consumidor, que este año le ha costado lo mismo adquirir estas frutas en su supermercado y tiendas de barrio".
El incremento del precio pagado al productor no ha repercutido, por tanto, al consumidor, pero sí "era muy esperado" por los productores que "también necesitan años como el que hemos tenido, porque en nuestra comarca están trabajando con tecnología punta para garantizar unas condiciones únicas de calidad". Jiménez, destaca la calidad y trazabilidad del melón y sandía de Castilla-La Mancha, que "difícilmente podemos ver en producciones que llegan de otros países".
Por su parte, José Ángel Serrano, representante del sector productor, ha destacado que esta campaña ha sido una la clara muestra de lo que siempre debería ser y asegura que apostando por la calidad del producto la campaña se comporta siempre muy bien.
Para Antonio Atienza, como representante del sector comercializador, otra de las claves este año ha estado en la exportación. Incide en que "los compradores ya conocen la excepcional calidad de nuestro producto y aunque el Coronavirus haya rebajado considerablemente las cifras de turistas en nuestro país y, por tanto, de consumo, han demandado desde sus países de origen nuestros melones y sandías". "El buen tiempo y temperaturas más altas en Europa, han favorecido también las exportaciones", ha dicho.
Por último, Alberto Marcilla, director de Banca Rural de Globalcaja, patrocinador de las lonjas de melón y sandía de Castilla-La Mancha, ha destacado cómo a su entidad y a la Interprofesional les une unos objetivos comunes: apoyar y generar valor en el sector agroalimentario. "Para que al agricultor le vaya bien necesita producir y organizaciones fuertes y empresas auxiliares como Globalcaja que le apoye financieramente", ha dicho. Marcilla ha asegurado que "nosotros buscamos alianzas estratégicas, como con la Interprofesional, para generar valor en el sector agroalimentario".