Los productores de Castilla-La Mancha han mostrado su disposición y compromiso de aumentar la superficie del cultivo del girasol si la Unión Europea modifica la normativa y permite la siembra en parte de las 550.000 hectáreas de barbecho de rotación y barbecho, que en estos momentos deben dejarse sin cultivar en Castilla-La Mancha para cumplir con las exigencias de la Política Agraria Común.
Así quedó de manifiesto en la reunión que ASAJA Castilla-La Mancha celebró en Cuenca y a la que acudieron más de un centenar de agricultores de la provincia, principal productora de girasol de la región y una de las primeras de España.
Según ha informado en nota de prensa la organización agraria, el vicepresidente regional, Manuel Torrero, indicó durante su intervención que es un buen momento para exigir a la Unión Europea cambios en un modelo en el que ha ido ganando terreno el medioambientalismo en detrimento de los productores, "y ha convertido a los agricultores en jardineros".
Torrero lamentó que un hecho trágico como es la invasión rusa a Ucrania, haya puesto de manifiesto lo que desde nuestra organización agraria venimos denunciando en los últimos años, como es la situación de vulnerabilidad del sistema productivo europeo, con continuas limitaciones, trabas, exigencias y competencia con productos de Terceros Países que no están sometidos a los mismos controles que en la Unión Europea.
Girasol de Ucrania
Desde Asaja han recordado que en estos momentos España produce sólo el 30 por ciento del girasol que necesita y, del 70 por ciento restante, más de la mitad procedía de Ucrania. "Lamentablemente, y debido a la invasión rusa, el cultivo del girasol en Ucrania ha desaparecido y las previsiones apuntan a que en un plazo de dos meses nuestro país se quedará sin aceite de girasol", han denunciado.
Asaja, que ha precisado que el aceite de girasol se encuentra en centenares de productos que forman parte de la cesta de la compra y por ello es urgente buscar soluciones que permitan afrontar la situación cuando llegue el caso, ha defendido que entre las soluciones a corto plazo se encuentra la de aumentar la superficie del cultivo del girasol para aumentar la producción y que, de este modo, no seamos tan dependientes de mercados exteriores.
Por ello, han animado a los agricultores a planificar una mayor superficie de girasol, una vez se confirme la "liberalización de barbechos" en la reunión que mantendrán los ministros de Agricultura de la Unión Europea el lunes día 21 de marzo.
"El compromiso de los agricultores es un claro mensaje a la Unión Europea que debe orientar la PAC al agricultor profesional y atender a la reforma del sistema productivo con el mismo respeto al medioambiente, pero garantizando una soberanía alimentaria que en estos momentos ya hemos perdido", han concluido.