Hace falta una actuación "contundente y determinante" de los gobiernos de Francia y España contra los ataques de los agricultores franceses a los transportistas españoles en las rutas de conexión con Europa. Así lo ha dicho este miércoles en Bruselas el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, tras el bloqueo que están sufriendo en la frontera los productos españoles y castellano-manchegos.
En declaraciones a los medios antes de intervenir en el Comité de Regiones por los efectos de la DANA, Page ha considerado necesario formalizar un protocolo entre los gobiernos de Emmanuel Macron y Pedro Sánchez para evitar el "hábito" y la "costumbre" de obstaculizar el tránsito de camiones en las rutas internacionales.
Como viene informando EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM, agricultores franceses han derramado este martes dos cisternas de vino de Castilla-La Mancha en el peaje de Le Boulou, en la autopista A9, donde se encontraban protestando contra el acuerdo entre la Unión Europea y Mercosur, impidiendo la circulación de camiones procedentes de España.
Vino manchego
Se trata de dos cisternas de la empresa de transportes Travesa, ubicada en Campo de Criptana (Ciudad Real), que contenían vino blanco. En total, los manifestantes han vaciado 100.000 litros -50.000 por cada camión- que han quedado derramados en la calzada.
Estas situaciones, en opinión de Page, no deben permitirse: "A la postre lo que son, son delitos", ha manifestado el presidente de la Junta, añadiendo que "creo que debiera haber ya un procedimiento y un protocolo claro entre el gobierno francés y el gobierno de España para evitar este tipo de incumplimientos y de delitos".
Esta situación exige, a juicio del líder castellano-manchego, "una actuación contundente y clara del Gobierno francés en su correspondiente competencia y también, lógicamente, la determinación del Gobierno de España".
Faltan soluciones
A juicio de Page, los ataques "incumplen la legislación de mercado", y además "lo terminan pagando con los productores españoles" y con Castilla-La Mancha afectada, que realmente cumple "como los primeros, no solo con las normas y que además no les pagamos con la misma moneda", ha afirmado el presidente regional.
"Si hubiera sido un caso excepcional, pero es que ya son muchos años los que vamos viendo cómo se produce ya un hábito que realmente tiene que contar con soluciones", ha concluido el presidente de Castilla-La Mancha.
Diversas organizaciones agrarias han mostrado su preocupación por esta nueva cadena de ataques de los agricultores franceses a los productos españoles, especialmente el vino.