36 trabajadores de Ciudad Real quieren que les despidan ya
Los trabajadores de la Panificadora y de Productos de Alimentación Tomelloso se han concentrado hoy ante el Ayuntamiento de la localidad ciudadrealeña para protestar por "la indolencia" de los propietarios de estas empresas y exigir que les despidan para poder cobrar el paro.
Los 36 empleados, que han sido arropados por la alcaldesa de Tomelloso, Inmaculada Jiménez, llevan entre cuatro y ocho meses sin percibir ningún ingreso, según ha señalado CCOO en un comunicado en el que ha recordado que no tienen trabajo efectivo desde que Sanidad precintó en marzo los hornos de la Panificadora por insalubridad.
El pasado 5 de mayo los propietarios de la panificadora y de la red de tiendas en las que se venden sus productos celebraron una junta extraordinaria en la que decidieron iniciar la tramitación de un expediente de regulación de empleo de carácter extintivo para todos los trabajadores.
En la junta extraordinaria los socios propietarios otorgaron a tres de ellos poderes mancomunados para administrar ambas empresas y gestionar el proceso de cierre y liquidación, puesto que al anterior administrador llevaba meses sin ejercer debido a una grave enfermedad incapacitante.
La abogada designada para negociar el ERE con los representantes de los trabajadores ha renunciado antes de remitir la documentación a los sindicatos, y también han dimitido dos de los tres miembros del nuevo órgano administrador, donde sólo queda una persona que carece de capacidad legal para tomar decisiones.
"Abandonados"
Ante esta situación, el secretario general del ámbito de la Industria de CCOO en Ciudad Real, David Vera, ha explicado que "los trabajadores están abandonados a su suerte y atrapados en una situación insufrible, ya que no tienen trabajo ni se tramitan sus despidos y tampoco cobran sus nóminas ni pueden apuntarse al paro".
Los trabajadores y los sindicatos exigen "seriedad y responsabilidad" a los propietarios de la panificadora y de la red de tiendas de distribución de los productos que elaboraba.
"Tienen que designar de inmediato nuevos administradores u otorgar al que queda capacidad legal para tomar decisiones" para poder iniciar de una vez la negociación de ERE, ya que los trabajadores y sus familias no pueden aguantar más esta situación", ha subrayado Vera.
De hecho, casi todos los empleados han interpuesto ya demandas por despido improcedente, por falta de trabajo efectivo y por acumulación de impagos de nóminas", ha explicado el sindicalista.