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El ejemplo de una futurista bodega castellano-manchega para aprovechar al máximo cada gota de agua
Finca Antigua, perteneciente a la familia de viticultores Martínez Bujanda, aplica la nanotecnología de la empresa Nanolabs en sus cultivos vinícolas para ahorrar hasta un 50 % de agua y ha disminuido sustancialmente la cantidad de lodos.
En un comunicado, ha recordado que Finca Antigua cuenta con 421 hectáreas en su finca de Los Hinojosos (Cuenca), prácticamente con la totalidad de la explotación en regadío.
En los últimos cuatro años, la pluviometría de la zona, que se sitúa en torno a los 400 litros por metro cuadrado de media, se encuentra rozando los 300 litros, un 25 % menos, con lo que "el ahorro de agua se ha convertido en un aspecto fundamental".
Desde hace tres años, Finca Antigua aplica a sus cultivos la tecnología "ASAR", que actúa físicamente sobre el agua y "reduce su punto de fusión, ebullición, permeabilidad, mejora su conductibilidad térmica, disminuye su tensión superficial y aumenta su capacidad de disolución y su actividad electrónica".
"El resultado es un incremento del aprovechamiento del agua por la planta, debido a una mejor penetración del agua en el sustrato y en las raíces, convirtiéndola en un mejor vehículo de nutrientes y optimizando el consumo de agua, ha añadido.
En 2015, se instalaron equipos injertados en seis ramales portagoteros de una parcela y se realizó un estudio "con datos muy significativos", que concluyó que el riego con agua tratada con nano frecuencias proporcionaba al medio acuoso mayor fluidez y ligereza y que, de esta forma, el agua era más eficiente en la planta.
La familia de viticultores Martínez Bujanda cuenta con cinco bodegas repartidas por diferentes denominaciones de origen.
