El gigante inmobiliario de la región duplica el número de viviendas que va a construir
Quabit ha revisado al alza su plan de negocio 2017-2021 de forma que casi ha duplicado (+92%) el objetivo de nuevas viviendas que prevé promover en este periodo, hasta situarlo en 7.880 unidades, desde las 4.100 inicialmente estimadas.
La compañía que controla y preside Félix Abánades ha elevado sus previsiones tras lograr nuevas líneas de financiación y comprar suelos con menores costes de los inicialmente previstos, y ante las previsiones de continua mejora y recuperación del sector inmobiliario en España.
Por el momento, la inmobiliaria ya tiene en marcha 18 promociones que suman unos 1.655 viviendas. Además, tras las compras de suelo cerradas este año, por un total de 150 millones de euros, suma con una cartera de terrenos de casi un millón de metros cuadrados que, según asegura, ya le garantizan levantar 6.720 nuevas viviendas.
No obstante, Quabit, una de las promotoras que logró sobrevivir a la crisis, prevé seguir comprando suelo, de forma que estima invertirá un total de 673 millones en el periodo que abarca su plan de negocio, un 48% más respecto a los 455 millones inicialmente previstos.
En cuanto a la financiación, la compañía asegura contar con "una estructura financiera y una situación patrimonial saneadas". Además, las compras de últimos suelos se han pagado a través un sistema mixto, que combina los recursos logrados de un fondo de inversión y acciones de la empresa procedentes de ampliaciones de capital.
Dividendo en efectivo en 2019
En paralelo al incremento de la actividad, por el que construirá casi el doble de viviendas de las previstas, Quabit ha elevado su previsión de ingresos.
Así, calcula que la entrega de toda la cartera de viviendas proyectada le generará una facturación total de 1.915 millones de euros, además de un 'cash flow' (flujo de caja) operativo de unos 463 millones.
De esta forma, el objetivo de la compañía es alcanzar el horizonte de 2022 con un ritmo de entrega de unas 3.000 viviendas al año, por tanto, que sus ingresos se sitúen en unos 600 millones y su beneficio bruto de explotación (Ebitda) en 100 millones. La compañía cerró 2016 con un Ebitda negativo de 19 millones y una facturación de 32,7 millones.
De esta forma, la inmobiliaria, que ya ha comenzado a pagar dividiendo, pero en acciones, confía en poder retribuir a los socios en efectivo a partir de 209. Calcula que repartirá unos 87 millones de euros entre los socios en este periodo.