La producción del helicóptero NH90 en la factoría de Airbus Helicopters Albacete finalizará en unas semanas. Serán los últimos modelos que se ensamblarán por completo en estas instalaciones que pasará a fabricar piezas, algo que, según UGT, "pondrá en serio riesgo" la viabilidad de la planta y "supondrá la descapitalización de la industria".
Así lo ha denunciado el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, que ha participado este jueves en una asamblea con los trabajadores y donde su presencia, junto a la del secretario regional, Carlos Pedrosa, el secretario general de UGT FICA, Pedro Hojas, además de otros representantes provinciales y locales, ha servido para trasladar a la dirección de la factoría, "un mensaje de claridad en defensa de la industria en nuestro país y en Albacete" .
De momento los trabajadores, unos 450 en total, siguen con la línea de ensamblaje del NH9. "Estamos entregando los últimos helicópteros comprometidos con el Ejército", ha especificado Sergio Medina, trabajador de Airbus en Albacete. Después, en sus cadenas de montaje sólo se fabricarán las colas, "piezas menores" que suponen un actividad que es "fácilmente subcontratable".
La nueva situación conlleva la pérdida de lo que antaño "era una industria puntera, con trabajadores formados y cualificados a nivel técnico donde había condiciones buenas para desarrollar la vida de estos trabajadores", ha sentenciado Álvarez. Ante esta situación pedirán al Gobierno de España, el que salga de las urnas tras la cita del próximo 28 de abril, que haga uso del peso accionarial con el que cuenta dentro del Consorcio "y que retome la presencia en el Consejo de Administración". El objetivo es que la planta siga ensamblando helicópteros y no piezas sueltas. "No podemos convertirnos en un centro que haga cosas que puede hacer cualquiera", ha dicho el secretario general de UGT.
Denuncia por discriminación
Justo a las puertas de la empresa los líderes de UGT han denunciado la situación que sus "compañeros" vienen sufriendo por parte de la dirección del a empresa. "La dirección no puede discriminar a nadie porque no le guste".
Así lo ha denunciado el propio Álvarez quien ha advertido a la dirección de la empresa para que no se sigan dado, "en el siglo XXI" algún tipo de "discriminación", que según ha explicado se deben a que a la empresa "no le gusta la posición de la sección sindical y que todas las denuncias que ha ido haciendo las ha ido ganando".
Algo que la organización usa "en mil y una cuestiones que discriminan a los afiliados" y que tratan de "desprestigiar" a la sección sindical, ha denunciado.