La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha acordado la aprobación de la adquisición por parte de Helios Healthcare Spain S.L.U. (Grupo Quirón) del negocio sanitario de la Clínica Santa Cristina (CSC) en Albacete. Esta decisión va a acompañada de un paquete completo de compromisos dirigidos a mejorar la calidad en la prestación privada de servicios médicos; evitar el encarecimiento de precios, y garantizar el acceso de competidores en los hospitales de Quirón.

Con esta adquisición desaparece el único competidor privado del Grupo Quirón en la provincia, por lo que tendrá el monopolio en la prestación privada de servicios sanitarios con internamiento. Por esta razón, la CNMC ha realizado una investigación a fondo y tras sucesivas propuestas ha aceptado un paquete de compromisos dirigidos a evitar todos los riesgos y efectos adversos sobre la competencia. La CNMC vigilará el cumplimiento de estas garantías, que Grupo Quirón no podrá modificar sin previa autorización, hasta 2024.

En cuanto a su relación con los profesionales sanitarios, Quirón se ha comprometido a mantener la relación jurídica actual con todos ellos, así como a garantizar el acceso a los espacios sanitarios. El grupo sanitario realizará una inversión de 1,5 millones de euros en mejora asistencial en los próximos tres años. Algunos de los compromisos permiten asimismo evitar un posible incremento de precios, así como el mantenimiento de los profesionales sanitarios que venían prestando sus servicios en ambos hospitales,  el acceso a los espacios sanitarios en las condiciones anteriores a la operación, la no cesión de las claves médicas, y el mantenimiento de la cartera de servicios y las inversiones comprometidas, especialmente aquellas dedicadas a la implantación de las nuevas especialidades. 

Para garantizar la colaboración con la sanidad pública en las actuales condiciones, Quirón se compromete a prestar al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), la misma cartera de servicios que presta en la actualidad y a no empeorar los indicadores de calidad asistencial con respecto a los pacientes derivados de la sanidad pública; así como a no cerrar determinadas especialidades, entre otras, las que no son prestadas por el Hospital Público de Albacete.