Ennomotive, una comunidad de innovación abierta que conecta a empresas e ingenieros para resolver desafíos tecnológicos, ha seleccionado a tres empresas para desarrollar un respirador de bajo coste, AirVita, donde se necesite para luchar contra la COVID-19.
El nuevo respirador, basado en el control de presión con medición de volumen, ha sido diseñado por Frede Jensen, un ingeniero británico con más de 30 años de experiencia en el desarrollo de dispositivos médicos.
La pre-serie de validación de AirVita se fabricará en Toledo y estará destinada inicialmente a asegurar las reservas de los hospitales españoles, según ha informado Vithas, una de las empresas participantes.
Dado su reducido precio y tamaño, su diseño compacto y fácil mantenimiento, AirVita estará a disposición de todos aquellos países que se encuentren en una situación de emergencia, hospitales de campaña en países con economías más débiles y ejércitos de cualquier parte del mundo.
Si bien el coste en la pre-serie se estima en 1.800 euros la unidad, el objetivo es reducirlo hasta 1.000 euros para que este respirador pueda llegar a aquellos centros que no pueden permitirse la adquisición de respiradores de alta gama, cuyo coste supera los 20.000 euros.
Uno de los objetivos de este proyecto de desarrollo sostenible es su internacionalización y la posibilidad de fabricar el respirador en cualquier punto del planeta libre de derechos.
Se trata de un proyecto sin ánimo de lucro liderado por Ennomotive (desarrollo del prototipo y coordinación) en el que participan las empresas Vithas y su fundación (homologación), McFly Technologies (industrialización) y lyntia (financiación pre-serie).
Además, colaboran otras instituciones y empresas como la Universidad Francisco de Vitoria, la Universidad Católica de Valencia, Medical Simulator, la Fundación de Ingenieros ICAI para el desarrollo, la compañía de energía renovable Capital Energy y el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla, en cuyo servicio de Medicina y Cirugía Experimental se van a realizar los ensayos animales.
La iniciativa surge a raíz de un concurso internacional convocado el 18 de marzo por ennomotive.com al que se presentaron más de 50 soluciones.