Menos visitas a apartamentos y casas, bajada de precios y aumento de dificultades para acceder a una financiación. La crisis del coronavirus ha provocado un momento delicado en el sector inmobiliario que afronta con incertidumbre la nueva normalidad.
Julia Bravo, gerente de Inmodeko Inmobiliaria y Reformas en Albacete, ha señalado que "desde el mes de marzo, la venta ha caído más de un 30 por ciento, al igual que la firma dehipotecas y los precios de viviendas de segunda mano". Sin embargo, "el mercado de alquiler sigue siendo el más demandado", algo que vienen observado día tras día.
Desde la inmobiliaria no se han podido concertar visitas hasta la fase 2, ya que, según han indicado, "los propietarios no estaban dispuestos a afrontar el riesgo". De este modo, "las pérdidas se han notado bastante para el profesional inmobiliario y para los dueños de dichas viviendas, tanto en venta como en alquiler".
A pesar de que durante el confinamiento y las primeras fases de la desescalada, los inmuebles se han enseñado a través de Internet, Bravo sostiene que "quien va a adquirir una vivienda, ya sea para alquiler o compra, quiere verla in situ" y "de todas formas, las visitas todavía son escasas porque los propietarios prefieren esperar un poco más".
En lo que respecta a la demanda estival, esta se ha disparado notablemente en pueblos y en la periferia de las ciudades, ya que se trata de "precios más asequibles, casas más amplias, con más luz y cerca de zonas verdes", a lo que se ha sumado el no poder viajar fuera de España y la incertidumbre de no saber en qué condiciones se podrán visitar las playas este verano.
En este contexto generado por la pandemia y según apuntan desde la inmobiliaria, "los compradoressaben que ahora las viviendas caerán a corto plazo entre un 5% y un 10%, sobre todo en la ciudad al tener mayor densidad de población y en zonas de mayor desempleo". De hecho, muchos clientes ya han pedido la bajada de precio de sus viviendas para "agilizar la venta".
"Creemos que los potenciales compradores no podrán acceder a una vivienda, por lo que el mercado de arrendamiento marcará una sobredemanda. Somos conscientes de que bajarán los precios de alquiler y habrá muchos cambios de inmueble por no poder soportar gastos, sin embargo,es necesaria una mayor oferta en este campo", ha concluido Bravo.