En plena segunda ola de la pandemia, más de 550 hoteles están a la venta en España, el 19 % más que en el mes de marzo, justo cuando estalló la crisis sanitaria, de los cuales 22 están en Castilla-La Mancha, según los datos facilitados por el portal inmobiliario Idealista.
Si se suman las cantidades que sus propietarios piden por ellos, el montante total sobrepasaría los 1.200 millones de euros.
Aunque hay hoteles disponibles en todas las comunidades autónomas, Andalucía y Cataluña concentran la mayor parte de la oferta con 114 y 101, respectivamente. Le siguen Castilla y León (67), Baleares (59), Comunidad Valenciana (43), Galicia (32), Canarias (26) y Madrid (19).
Aunque de media en España el número de activos hoteleros puestos a la venta se ha incrementado en torno al 19 %, en La Rioja, por ejemplo, el número se ha duplicado, en Baleares el aumento alcanza el 84 %, en Andalucía y Galicia supera el 45 %, en Canarias se acerca al 37 % y en Aragón y Castilla y León es del 20 %.
El hotel más caro de España a la venta en Idealista se encuentra en Sant Joan de Labritja (Ibiza) con 52,5 millones. En Canarias también figura un inmueble en San Bartolomé de Tirajana, en Las Palmas, que cuesta 31 millones; en Benalmádena (Málaga) hay otro por 28,5 millones; en Barcelona uno de 26,5 millones, y en Madrid un hotel que puede adquirirse por 21,5 millones de euros.
Esperanza de recuperación
A pesar de la irrupción de la crisis de la covid-19 y sus efectos sobre el turismo, el sector hotelero en España comenzará a recuperarse en la primera mitad de 2021 y el segmento vacacional será el primero en hacerlo gracias a la llegada de las vacunas, según Savills Aguirre Newman.
Los responsables de la división de hoteles de la consultora inmobiliaria creen que para recuperar los niveles previos a la pandemia el sector tendrá que esperar dos o tres años a partir del hallazgo de la solución sanitaria, prevista en el primer semestre de 2021.
Mientras tanto, las empresas necesitan una estrategia de financiación unificada tanto a corto como a largo plazo y cuando el mercado se reactive habrá nuevas oportunidades para los inversores de diferentes perfiles y con un enfoque más especializado.
Asimismo, han destacado la importancia de un plan de recuperación específico del sector ya que uno de los principales problemas a corto plazo es que la demanda internacional se mantenga baja.