La crisis social y económica derivada de la pandemia de COVID-19 ha agravado la situación de extrema necesidad de muchas familias y ha puesto a otras tantas en una posición muy delicada. Por esta razón, la Fundación Soliss ha apostado por redoblar esfuerzos para poder llegar a más personas con este proyecto.
A lo largo de 2020, la producción de los huertos solidarios aumentó considerablemente hasta alcanzar las cinco toneladas de alimentos, frente a las tres del año anterior, dando servicio a más de 15000 familias de la región.
El objetivo de esta iniciativa es facilitar el acceso de toda la sociedad a productos de temporada, cultivados bajo las premisas de la agricultura ecológica. Así se favorecen los hábitos de consumo saludables por medio de una dieta sana y equilibrada, algo muy importante especialmente en el caso de los niños.
Esta iniciativa arrancó en marzo de 2016, y desde entonces ha tenido una gran acogida por parte de la sociedad castellano-manchega gracias a su carácter solidario y a su importante aportación a los bancos de alimentos de la región. Actualmente los huertos solidarios están ubicados en Olías del Rey, Talavera de la Reina, Cuenca, Aranjuez y Motilla del Palancar.