La campaña de verano generará cerca de 20.000 empleos en Castilla-La Mancha

La campaña de verano generará 19.720 contratos en Castilla-La Mancha, un 31 por ciento más que en 2020, cuando se firmaron 15.057, según las previsiones de contratación de la empresa de recursos humanos Randstad.

El incremento experimentado en la comunidad será 10,3 puntos porcentuales superior a la media nacional (20,7 %), el mayor de España; y en lo que se refiere a volúmenes de contratación, el registrado en Castilla-La Mancha supondrá el 4,5 %, ha informado en nota de prensa la compañía.

A nivel provincial, Toledo con 5.740 firmas, y Guadalajara con 4.270, liderarán los volúmenes de contratación de Castilla- La Mancha, y les siguen Ciudad Real (4.000), Albacete (3.950) y Cuenca (1.760).

En el conjunto del país, el verano dejará 438.550 contratos, un 20,7 % más que el pasado año, aunque un 29,5 % por debajo del volumen obtenido en 2019, y la cifra que se obtendrá en la campaña estival de este año es similar a la de 2015, cuando se firmaron 437.873 contratos.

Además, las previsiones de contratación presentan notables diferencias a nivel autonómico, aunque todas las comunidades verán crecer sus cifras de contratación.

Castilla-La Mancha (31 %), Aragón (27,1 %) y Cantabria (25,7 %) liderarán los crecimientos de la contratación este verano con respecto al año pasado.

Por provincias, Guadalajara (38,8 %), Toledo (34,5 %), Cuenca (34,5 %) y Teruel (30,7 %) liderarán los incrementos de la contratación este verano.

Según Randstad, las expectativas de recuperación tienen como uno de sus baluartes el turismo, ya que la llegada de visitantes internacionales, junto al dinamismo de los turistas nacionales, una vez se hayan levantado las restricciones y se recobre la confianza gracias a la vacunación contra la covid-19, supondrá un dinamismo fundamental para la economía.

Otro reto para la recuperación será la campaña de rebajas y también la hostelería es otro de los sectores que más impulsan el empleo en el periodo estival así como el ocio.

Por todo ello, las empresas están interesadas en que los candidatos cuenten con experiencia en un puesto similar, el conocimiento de idiomas, sobre todo el inglés, y perfiles orientados a la atención al cliente y con capacidad comercial así como valoran la predisposición a trabajar en equipo y a resolver problemas derivados de la operativa diaria.