El Gobierno de Castilla-La Mancha ha valorado el desarrollo y puesta en marcha de los cinco espacios coworking en zonas rurales de la región impulsados a través de la ayuda directa concedida por el Ejecutivo autonómico a los ayuntamientos de Riópar (Albacete), Almadén (Ciudad Real), Quintanar del Rey (Cuenca), Molina de Aragón (Guadalajara) y Belvís de la Jara (Toledo); con fondos procedentes de la Conferencia Sectorial contra el Reto Demográfico para la región.
Según ha informado la Consejería de Economía, Empresas y Empleo en nota de prensa, la directora general de Autónomos, Trabajo y Economía Social del Ejecutivo autonómico, Ana Carmona, ha visitado algunos de estos espacios, cuya puesta en marcha tiene como objetivo fomentar el emprendimiento a través de un primer espacio para la implantación de proyectos emprendedores que ayuden a asentar y atraer población para estas zonas.
Desde la aprobación de la ayuda directa, tal y como ha detallado la directora general, "desde la Consejería de Economía, Empresas y Empleo se han realizado reuniones de seguimiento acerca del avance de los proyectos, estando prácticamente todos ellos en marcha"; e incluso la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, visitó las instalaciones del que se está habilitando en la localidad de Almadén.
La ayuda aprobada en el Decreto 20/2022, de 29 de marzo, superaba los 578.000 euros procedentes de la Conferencia Sectorial antes citada, y a partir de la resolución se ha abonado ya a cada uno de los ayuntamientos el 80 por ciento de la ayuda directa concedida de manera individualizada, que en su cuantía total asciende a 115.785 euros.