Naturgy generó 1.184 GWh de energía renovable en Castilla-La Mancha a lo largo de 2022, lo que supone un 16 por ciento más que el año anterior y equivale al consumo eléctrico anual de más de 340.000 hogares, o lo que es lo mismo, casi la mitad de hogares de la región.
La compañía cuenta con más de 1.000 MW de potencia instalada eólica, solar e hidráulica en la comunidad autónoma, operando actualmente 9 parques eólicos, 7 plantas solares fotovoltaicas y 10 centrales hidráulicas.
Gracias a la energía producida por estas 26 instalaciones, durante el pasado año se logró desplazar el uso de otras fuentes de generación eléctrica convencional, contribuyendo a reducir en más de 770.000 toneladas las emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero. Esta reducción de emisiones equivale a retirar cerca de 321.000 coches de la circulación en un año, según ha informado la empresa en nota de prensa.
Todas las instalaciones
Los nueve parques eólicos que están en operación en Castilla-La Mancha generaron en este periodo 500 GWh, lo que supone cubrir las necesidades eléctricas de más de 143.250 viviendas, y evitaron emitir a la atmósfera más de 318.100 toneladas de emisiones.
El parque eólico que aportó una mayor producción, 74,7 GWh, fue el de Los Pedreros, de 50 MW. Este parque comenzó a operar en 2005 y está situado en el término municipal de Fuente Álamo, en la provincia de Albacete. La energía producida el año pasado por Los Pedreros equivale al consumo de más de 21.400 hogares y evitó la emisión de más de 47.000 toneladas de gases contaminantes y de efecto invernadero.
Además, Naturgy cuenta con otras ocho instalaciones eólicas situadas en las provincias de Guadalajara, Ciudad Real y Albacete que suman un total de 172 aerogeneradores. En Guadalajara operan Loma Gorda y San Gil (Tartanedo), Peña I y Canredondo I (Canredondo); en Ciudad Real, Malagón I y Malagón II; y en Albacete, Sierra de la Oliva (Almansa) y La Losilla (Chinchilla de Montearagón).
En lo que respecta a tecnología fotovoltaica, la compañía opera siete plantas en Castilla-La Mancha que registraron una producción de 428 GWh de energía en 2022, equivalente al consumo eléctrico anual de más de 122.500 viviendas, y redujeron en más de 272.600 toneladas las emisiones contaminantes y de efecto invernadero.
La planta fotovoltaica que aportó una mayor producción, 89,44 GWh, fue la de La Nava, de 49 MW de potencia y situada entre las localidades de Puertollano y Almodóvar del Campo, en la provincia de Ciudad Real. La energía producida por esta instalación equivale al consumo eléctrico anual de más de 25.600 hogares y evitó la emisión de más de 56.900 toneladas de gases contaminantes y de efecto invernadero.
Naturgy cuenta también con otras instalaciones de generación fotovoltaica en la región. En las provincias de Ciudad Real y Toledo se sitúan las plantas Picón I, Picón II y Picón III y Carpio de Tajo, que comenzaron a operar en 2019, así como la fotovoltaica Toledo PV, en La Puebla de Montalbán, que es la más antigua de Europa, ya que inició su actividad en 1994 con una potencia pico de 1 MW. En Guadalajara, por otro lado, el año pasado comenzó a funcionar la planta Canredondo, de 22 MW.
Finalmente, y en cuanto a generación hidroeléctrica, la compañía opera en nueve centrales hidráulicas en las provincias de Guadalajara, Cuenca y Toledo, y una central minihidráulica en Guadalajara, instalaciones que generaron 257 GWh, energía suficiente para abastecer anualmente a más de 80.800 viviendas, y evitaron emitir a la atmósfera más de 74.800 toneladas de emisiones.
Compromiso con la transición energética
Naturgy trabaja para impulsar su papel en la transición energética y en la descarbonización. Actualmente, la compañía suma más de 5,5 GW de potencia en operación a nivel internacional y cuenta con una cartera de más de 195 proyectos en España, Australia y Estados Unidos.
En España, la compañía prevé iniciar a lo largo de este año la construcción de medio centenar de proyectos renovables en España, que suman una potencia acumulada superior a los 2 GW y que entrarán en operación entre 2023 y 2025.
Las inversiones en renovables realizadas en los últimos años por la compañía confirman su giro estratégico hacia un mix energético más sostenible y su compromiso con la transición energética. Todo ello, sin abandonar los objetivos fundamentales de creación de valor y crecimiento para cada uno de los negocios, así como los objetivos en materia de ESG.