La empresa distribuidora del grupo Iberdrola, i-DE, ha invertido 4.300.000 euros en la puesta en funcionamiento de una nueva subestación eléctrica en el término municipal de Atalaya del Cañavate (Cuenca).
Según ha informado la compañía en una nota de prensa, cuenta con un transformador de una potencia de 20 megavoltioamperios (MVA) y "va a permitir el despliegue de una importante red de puntos de recarga de alta potencia para vehículos eléctricos, además de contribuir al desarrollo económico y a la mejora de la garantía de suministro en las comarcas conquenses de La Mancha y Manchuela".
La nueva subestación eléctrica de ST Caparral puede atender simultáneamente 120 puntos de recarga rápida de 150 kW o 50 puntos de 350 kW, potencia mínima establecida para los puntos de recarga destinados a vehículos pesados. Además, "es susceptible de ampliación hasta con tres transformadores de 40 MVA, lo que supondría albergar hasta 120 MVA, capacidad que multiplicaría por seis el número de puntos recarga".
Impulso de la movilidad eléctrica
Iberdrola ha elegido una "ubicación estratégica" para esta subestación, que se encuentra junto la encrucijada entre la autovía del Este (A-3), la autovía de Alicante (A-31) y la autovía del Guadiana (A-43), convirtiéndola en "especialmente relevante a la hora de alcanzar los objetivos de descarbonización de la economía, impulsando la movilidad eléctrica, especialmente la del transporte pesado".
La subestación también contribuye a cumplir con el Reglamento de Infraestructuras de Combustibles Alternativos, recientemente aprobado por la Comisión Europea, que obliga a los países miembros a instalar antes del año 2026 estaciones de recarga rápida para coches, furgonetas y vehículos eléctricos pesados cada 60 kilómetros en los principales corredores de transporte de la Unión Europea.
Así, su instalación se enmarca en las iniciativas susceptibles de recibir fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia por el que se regula la concesión de subvenciones directas a las empresas distribuidoras de energía eléctrica para la realización de inversiones de digitalización de redes de distribución y en infraestructuras para la recarga del vehículo eléctrico.
Castilla-La Mancha
En Castilla-La Mancha, i-DE gestiona más de 26.000 km de líneas de baja y media tensión y cerca de 2.600 km de líneas de alta y muy alta tensión. Asimismo, cuenta con cerca de 9.600 centros de transformación en servicio y 76 subestaciones.
La compañía prevé invertir 222 millones de euros en redes inteligentes en Catilla-La Mancha entre 2023 y 2025, con el objetivo de reactivar la economía y el empleo y alcanzar los objetivos de descarbonización comprometidos en el PNIEC.