Rafael Ruiz (Tarancón, Cuenca) es CEO de la compañía distribuidora de alimentos y bebidas Teógenes Ruiz, fundada en 1887. Al frente de la misma, como cuarta generación de la familia propietaria, se puso en el 1998, hace más de un cuarto de siglo. Cuando aceptó coger el testigo de su padre le puso una sola condición: poder desarrollar su propio proyecto. Para ello se había formado debidamente como licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales, aunque más adelante se especializó en Auditoría y Contabilidad y completó un exigente Programa de Dirección General en la escuela de negocios IESE.

Después de más de 13 años como vicepresidente de la Asociación de Supermercados de Castilla-La Mancha (ASUCAM), el pasado verano asumió la Presidencia de la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha (AEFCLM), sucediendo al toledano Juan Ignacio de Mesa. Tras ocho meses en el cargo, hace un balance "muy positivo" de esta primera y concede esta entrevista a EL ESPAÑOL - EL DIGITAL CLM nada más acabar una 'Jornada de Talento', muestra de que la formación de las nuevas generaciones de empresarios y de la retención del talento en Castilla-La Mancha es una de sus grandes prioridades.

Pide a las Administraciones públicas que faciliten el crecimiento de las empresas con impuestos bajos, puesto que considera que los niveles impositivos actuales restan competitividad a las compañías españoles, y señala el arraigo como el principal valor de las empresas familiares, cuya aportación económica y social a Castilla-La Mancha es muy relevante.

¿Cuántas empresas familiares hay en Castilla-La Mancha y cuántos empleos generan?

Las empresas familiares suponen más del 95 % del tejido empresarial, generan un 84 % del empleo privado y aportan un 75 % del PIB en la región. Son cifras muy importantes que nos recuerdan la gran responsabilidad que tenemos y que debemos hacerlo lo mejor posible porque de ello no solo depende el desarrollo de nuestras empresas, sino de nuestra región.

¿Qué valor añadido aporta el carácter familiar de las empresas?

Creo que el principal valor es el arraigo. La empresa familiar, por norma general, invierte allí donde empezó su actividad y crece localmente. También hay indicadores que muestran que el grado de satisfacción de los trabajadores es mayor cuando forman parte de una empresa familiar, entre otras cosas porque creamos un empleo más estable.

Acaban de cumplirse ocho meses desde su nombramiento como presidente de la AEFCLM. ¿Qué balance hace de esta primera etapa al frente de la asociación?

Un balance muy positivo. Me he planteado la Presidencia como si estuviese al frente de una empresa. Empezamos planteando un plan estratégico y de ahí ha salido un plan operativo que es el que ahora estamos desarrollando. Queremos comunicar a la sociedad de Castilla-La Mancha qué es lo que hacemos y qué es lo que aportamos, porque donde hay empresa hay población, crecimiento y desarrollo.

"Sigue habiendo medios y sectores de la sociedad que intentan demonizar a los empresarios"

¿La sociedad castellano-manchega valora positivamente al empresario o sigue habiendo tabús?

Un estudio reciente de la Asociación Valenciana de Empresarios deja claro que la percepción que la sociedad tiene de los empresarios es mucho más alta de la que podamos percibir individualmente cada uno de nosotros. Eso es algo positivo, sobre todo si anima a emprender a aquellos que lo estén valorando. Es verdad que sigue habiendo algunos medios o determinados sectores de la sociedad que intentan demonizar a los empresarios, aunque eso es algo que va en contra de la cultura del esfuerzo. El objetivo común de la sociedad debería ser que cada uno dé lo mejor de sí mismo, sea trabajando o emprendiendo.

Castilla-La Mancha lidera los ránkings de confianza empresarial y el Gobierno regional presume de diálogo social. ¿Hay buen clima de negocio?

En Castilla-La Mancha hay mucha paz social. La relación que tenemos los empresarios con los sindicatos es buena y hay entendimiento a la hora de firmar convenios, aunque cada uno defienda sus posturas. Todos entendemos muy bien cuál es la situación de Castilla-La Mancha e intentamos no dejarnos contaminar por otras situaciones externas.

Con la Administración regional, además, mantenemos una relación muy buena, diría que magnífica, desde el presidente Emiliano García-Page hasta los consejeros de Economía y Hacienda. Patricia (se refiere a Patricia Franco, consejera de Economía, Empresas y Empleo) es una líder en su sector, está muy implicada y tiene muchísimas iniciativas. También hemos hecho acercamientos, y nos ha alegrado la acogida, con la Consejería de Educación.

A través de la actividad 'Empresarios en las aulas' los socios de la AEFCLM vamos a poder visitar centros educativos de Secundaria y aportar los valores de las empresas familiares a los jóvenes. Además, hemos llegado a un acuerdo con la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) que hemos llamado 'Raíces' porque queremos que a través de becas de formación y de la investigación logremos retener aquí el talento que tienen nuestros jóvenes.

"En sectores como el de la construcción necesitamos gran cantidad de profesionales"

¿Existe una brecha entre la formación actual que reciben los jóvenes castellano-manchegos y lo que demandan las empresas en cuanto a recursos humanos?

Hay en sectores como el de la construcción en los que las empresas necesitamos gran cantidad de profesionales y los alumnos no demandan esa formación. Algo que también ocurre con otros profesionales como los frigoristas, electricistas, etc. Desde la Asociación estamos trasladando nuestras necesidades a la Administración para que cree ciertos ciclos formativos o adapte los ya existentes incorporando ciertas habilidades y nos ha sorprendido la flexibilidad que han mostrado tanto la Consejería de Educación como la Universidad de Castilla-La Mancha.

Hablaba antes de que tienen buena relación con el consejero de Hacienda. ¿Hay que bajar los impuestos en España y en Castilla-La Mancha?

Hay margen para bajar los impuestos, y el primero que tiene que notarlo es el ciudadano. Ha subido mucho la inflación y su renta disponible es menor porque no se han deflactado las tablas del IRPF como se debería. Si la gente tiene más disponible dinero subirá el consumo y será bueno para todos.

"Pagar impuestos muy por encima de los de otros países nos resta competitividad"

Respecto a las empresas, se nos dice que tenemos una tasa impositiva baja, pero no es así. Los impuestos que pagamos están muy por encima, en algunos casos, de los países de nuestro entorno. Eso nos resta competitividad y nos dificulta el crecimiento.

Lo importante es que la Administración recaude más porque cobre a más empresas y a más trabajadores, no porque cobre más a los mismos. Si todo el mundo se puede desarrollar, ve crecer su renta y aumenta su volumen de actividad, a la vez que aumentan los recursos para la propia Administración se aumentan también los niveles competitivos de nuestras empresas respecto a los países de nuestro entorno.

¿Qué importancia tiene el mercado exterior para las empresas familiares de Castilla-La Mancha?

Las empresas familiares crecemos orgánicamente, que quizá no sea la forma más rápida de hacerlo, pero sí es la más estable a nivel financiero. Eso nunca puede ser impedimento para salir fuera a vender, que al final es una operación logística a no ser que decidas hacer una planta o una industria porque te lo exija allá donde quieras ir. A las empresas familiares no les da miedo salir al exterior. Estamos en un mercado nacional y europeo muy maduro y no nos queda otra que salir fuera si queremos crecer de una forma relevante. Por eso es tan importante que no se nos reste competitividad desde la Administración.

¿El carácter familiar de las empresas supone un obstáculo a la hora de encontrar socios financieros o inversores para que la compañía crezca? ¿Hay recelos internos a la hora de incorporar fondos externos?

La responsabilidad que tenemos como Asociación es trasladar a las nuevas generaciones la responsabilidad que tienen como empresarios y las capacidades necesarias para que asuman la continuidad de la empresa si así lo desean. Esa formación les hará que, en un momento dado, no les dé miedo crecer y decidir si es lo más conveniente o no que entre alguien de fuera y les permita desarrollar su capacidad financiera.

Un estudio de 2020 dice que tan solo dos de cada seis empresas familiares viven la sucesión con éxito. ¿Ese sigue siendo el gran Rubicón?

Es una de las grandes preocupaciones que tenemos en la AEFCLM. Por eso tenemos el Foro de Jóvenes y la Escuela de Sucesores, que tanto éxito tiene. En estos ocho meses que llevo como presidente hemos llegado a acuerdos con la escuela de negocios más importante del país para dar unas jornadas formativas, al igual que con despachos importantes que colaboran con nosotros. Hay que trasladar a los jóvenes la cultura del esfuerzo y lo que eso representa.

"La clave es hacer entender a las siguientes generaciones que con ellos la empresa puede ser más grande"

Las siguientes generaciones vienen con una preparación y una formación muy buena, pero creo que la clave es hacerles entender que la empresa puede ser más grande y se puede desarrollar más con ellos, que tengan una motivación, un reto. 

En mi caso, cuando un día llegué a casa y mi padre me dijo que si quería incorporarme a la empresa le dije que era suya y que iba a seguir siendo suya, pero que a partir de ese momento tenía que ser mi proyecto y que debía poder desarrollarlo, ya que para eso me había brindado la oportunidad de tener conocimientos y formación.

Lo que pasa es que, además del mérito y la capacidad, en el caso de las empresas familiares también entra en juego lo emocional. ¿Cuál es la clave para acertar en el proceso de elección del sucesor o sucesores?

Hay metodología y protocolo para ello, además de especialistas que te pueden ayudar. El que decide se puede equivocar, claramente, pero lo importante es habilitar mecanismos de control para que si eso ocurre la empresa sobreviva.

Hay modelos de éxito como el de alguna empresa familiar farmacéutica catalana que no tiene a nadie de la familia en el Consejo de Administración, que lo ha profesionalizado todo y ha introducido mecanismos de control. Eso, además, tiene la ventaja de que el sucesor, a través de los dividendos y de los recursos que le llegan, puede desarrollar otra actividad empresarial distinta en la que crecer individualmente si no considera a la original como su propio proyecto personal.

Las previsiones macroeconómicas para este 2024 son positivas aunque discretas, aunque mejoran sustancialmente con vistas a 2025. ¿Cómo perciben el clima económico las empresas familiares de Castilla-La Mancha?

Vivimos en un mundo global y la situación internacional nos afecta. Las noticias que nos llegan desde Alemania, que siempre ha sido el motor de Europa, no son buenas; China no va a crecer a la misma velocidad; América ya ha dicho que ellos primero, etc. Hay preocupación por el volumen de compra, que ha disminuido, pero nosotros somos optimistas por naturaleza. Las empresas, como las personas, nos adaptamos al medio. Tendremos que sortear todas las dificultades como lo hemos hecho siempre. Como le decía antes, lo que tiene que haber es la máxima facilidad para que podamos crecer. 

El Salario Minimo Interprofesional (SMI) ha subido un 54 % desde 2018. ¿Este incremento ha dificultado el crecimiento de las empresas o es positivo porque anima al consumo?

Ha afectado negativamente, sobre todo en algunos sectores como el agrícola o servicios. El empresario se lo piensa antes de contratar y asumir un coste superior, más que nada porque luego lo va a tener que trasladar al cliente. La subida del SMI considera que las situaciones en todos los sectores empresariales y en todas las provincias de España son iguales, cuando la realidad no es esa. Si no pones un SMI demasiado alto, a través de los convenios se singulariza la situación individual de cada sector y de cada provincia, por lo que el propio mercado laboral se regula. Si no encuentras determinados perfiles los vas a pagar más.

La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha llevado al Congreso una proposición no de ley (PNL) sobre la reducción de la jornada laboral semanal de 40 a 37,5 horas a partir de 2025. ¿Qué le parece?

Quiere reducir las horas de trabajo y que los empresarios sigamos pagando lo mismo al trabajador. ¿Qué significa eso? Que mi producto o servicio va a costar más y si no soy capaz de venderlo, como puede pasar en la hostelería o en la distribución, me veré afectado. La experiencia que ya se ha llevado a cabo en otros países no ha sido buena.

¿Cuáles son los siguientes paso que va a dar la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha?

Estamos preparando una 'Jornada Intergeneracional' que se celebrará el próximo 16 de abril. Invitaremos a representantes de varias generaciones de empresas familiares relevantes y conocidas de fuera de Castilla-La Mancha, además de un directivo de Microsoft que nos va a hablar de Inteligencia Artificial.

"Daremos el premio 'Empresa Familiar de Castilla-La Mancha' a Cerámicas La Paloma"

También le adelanto que este año daremos el premio 'Empresa Familiar de Castilla-La Mancha' a Cerámicas La Paloma, de Pantoja (Toledo). Son un ejemplo porque tienen valores, mucha tradición a lo largo de varias generaciones, proyección internacional y han crecido recientemente comprando otra empresa.