Los supermercados en España se ven afectados cada vez más por un continuo robo de productos en sus lineales. Así se desprende del III Informe de STC (The Source Tagging Company), una compañía especializada en la protección de productos en el punto de venta. Un fenómeno que está obligando a implementar medidas antihurtos para salvaguardar los artículos y, consecuentemente, al consumidor encontrarse con mayores medidas antirrobo en el super cada vez que hace la compra.
El 100 % de las cadenas consultadas "están convencidas de que si eliminaran de su tienda los sistemas antihurto y dejarán de utilizar collarines, carcasas de policarbonato… los robos aumentarían drásticamente según el 70 % y más ligeramente para el 30 % restante", aseguran desde STC.
El informe de la consultora detalla los productos más robados por comunidades autónomas. En el caso de Castilla-La Mancha esta relación de hurtos la encabeza el aceite de oliva, seguida por los ibéricos, licores, vinos y piezas de queso.
Como "producto singular", aquellos que no son los más robados pero su hurto destaca en la región, figuran las latas de atún o bonito.
Datos nacionales
El aceite de oliva es también el favorito por los cacos en otras siete comunidades autónomas del país: Aragón, Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid, Baleares o Extremadura. De hecho, en tan sólo un año, el aceite de oliva se ha convertido en lo más robado en los supermercados de la mitad del país, ocupando la segunda posición en el pódium de los cinco artículos que no pasan por caja, sólo por detrás de los licores.
Como hecho diferencial respecto a otras categorías del Top, en este caso no se trata de un robo marquista. "Se roba por igual el aceite de marcas reconocidas como las marcas blancas", asegura Salvador Cañones, socio director de STC Nedap.
El 90 % de los robos cometidos en los supermercados españoles se atribuyen a bandas organizadas y personas reincidentes no profesionales, según los datos extraídos del Informe de STC.
El estudio destaca que, a pesar de los robos, la mayoría de los hurtos no se realizan por necesidad, al menos no mayoritariamente. Se observa que los ladrones optan por productos de marcas reconocidas en lugar de los genéricos, excepto en el caso del aceite. Además, productos básicos como el pan, la pasta, la harina o el arroz no son blanco de los robos.
El informe también señala que el 96 % de las cadenas de supermercados consultadas colaboran activamente con entidades sociales y bancos de alimentos, proporcionando gratuitamente productos para atender a las necesidades reales de quienes más lo necesitan.